La frase es de Marianne Mollmann (foto), representante de Human Rights Watch, que fue invitada al puntapié inicial del debate por la legalización del aborto en la Cámara baja. Juan Carlos Vega (CC), presidente de la Comisión Penal, sostuvo que recibió cerca de 850 mails con amenazas. Cynthia Hotton fue silbada.
Podría catalogarse como el comienzo de un debate que será histórico. Es la primera vez que en la Cámara de Diputados comienza a discutirse la depenalización del aborto. La jornada comenzó con algunos inconvenientes -durante los primeros minutos estuvo cortada la luz de media sala-, Juan Carlos Vega (CC), presidente de la Comisión de Legislación Penal abrió el debate mencionando que en la Argentina se practican cerca de 450 mil abortos por año. Asimismo reparó en que se trata de un debate “cruzado por la religión y la pobreza” y dijo que había recibido cerca de 850 mail con amenazas.
La palabra luego derivó en la invitada, Marianne Mollmann, directora de Promoción y Defensa de la División de Derechos de las Mujeres de Human Rights Watch, que perteneciendo a una organización que pro Derechos Humanos sosstuvo que la penalización del aborto son "incompatibles" con ellos.
“En el 2008 más del 20% de las muestres registradas por emergencias obstetricas fueron por causa de abortos” explicó a los legisladores la especialista y agregó: “ la ilegalidad del aborto es la principal causa de muerte de las mujeres en el pais”, y este, “tiene que ver con el ejercicio de los Derechos Humanos de las mujeres”. Según estadísticas del Ministerio de Salud de la Nación, el 40% de los embarazos termina en aborto.
En este sentido se pronunciaron algunos de los diputados presentes, Vilma Ibarra (Nuevo Encuentro) dijo que “es el único caso en que el dictado de una ley salva vidas”. En concordancia con ello Maria Luisa Storani (UCR) dijo: “estamos legislando sonre la vida”, “salvando vidas”, ya que “las mujeres que mueren son las mujeres y niñas pobres”.
Por su parte, Ivana Bianchi (Peronismo Federal) se preguntó por “el derecho del niño por nacer, ¿dónde queda?” le consulto a Mollman. Quién le contestó que “no existe en la jurisprudencia el derecho del embrión”. “Hay diferencia entre embrión y niño por nacer”, añadió.
Luego hizo en hincapié en uno de los principales argumentos antiabortistas, lo que sostiene la Convención Americana de Derechos Humanos en su artículo 4 donde protege el derecho a la vida “en general, a partir del momento de la concepción”. Aquí puntualizó sobre la importancia de “en general” en la frase, ya que, según jurisprudencia que leyó en el marco de un caso de 1981, se sostuvo que el objetivo de la existencia de esta frase es el de “permitir que exista legislación doméstica no restrictiva respecto al aborto”.
También Bianchi preguntó sobre una práctica que, según afirmó la legisladora, se realiza en EEUU, que es la aparición de un mercado ilegal de embriones, por la existencia del aborto legal, utilizados para el desarrollo de “cosméticos”. Esta última pregunta generó risas entre los asistentes que debieron ser acalladas por el presidente de la comisión.
Una visión particular sobre la cuestion la aportó Marcela Rodriguez (CC), quién explicó que puede ser asimilable la jurisprudencia de la Corte Suprema en el caso Basavilbaso en los casos de aborto. Allí la Corte declaró la nulidad de una condena contra una ‘mulita’ que tenía cocaína en el estómago y que fue denunciado en el hospital denunciaron a esta persona. Principal preocupación por parte de las mujeres que abortan para no concurrir a los hospitales.
Otra conocida antiaborto es Cynthia Hotton (Valores para mi País) quien ni bien fue nombrada se escuchó un impresionante abucheo que debió ser nuevamente acallado por Vega, quien pidió respeto por las posiciónes diferentes. Luego Hotton se limitó a adherir a lo que sostuvo, según ella, el ex presidente de Uruguay, Tabaré Vasquez, a quien calificó como ateo, socialista y médico sobre el tema. “La ciencia demuestra que hay vida desde la concepción; las sociedades progresistas se ocupan del más debil, y aquí es el niño por nacer”, dijo incistiendo en el argumento.
Finalmente Mollman dejó una frase que puede marcar la importancia del debate, tanto en materia legal como real. “La mujer vive la consecuencia de la legislación en su cuerpo”, dijo. Luego varios legisladores pidieron al presidente de la Comisión el compromiso de tratamiento para el año que viene del tema. “Todo lo que se abre se termina”, les contestó Vega. Los aplausos inundaron la sala.