Son palabras de Luz Patricia Mejía, integrante de la Comisión Interamericana de Derechos Humano. Este miércoles participó de la segunda jornada organizada por la Comisión de Legislación Penal de la Cámara baja. La diputada Victoria Donda fue agredida por manifestantes antiaborto en las afueras del anexo.
“Estamos abriendo un debate silenciado, censurado en la Argentina” dijo ante una sala repleta en su mayoría por mujeres, el presidente de la Comisión de Legislación Penal de la Cámara de Diputados, Juan Carlos Vega (CC). Así abrió esta segunda jornada –la primera había sido en noviembre del 2010- de debate acerca de lo que denominó “el fenómeno del aborto” y advirtió que en sucesivas reuniones se “escucharan todas las voces”.
La invitada especial en esta ocasión era la venezolana Luz Patricia Mejía, integrante de la CIDH y relatora del organismo con respecto a los derechos de la mujer, comenzó su argumentación con una concepción clave que atravesaría todo su discurso, “los derechos reproductivos de la mujer” y la importancia que deben ocupar en la legislación de los estados aclarando que en la región “existen brechas en materia de derechos de las mujeres”.
Luego de detallar varios casos en los que actuó o se encuentra actuando la Comisión Mejía explicó el ejemplo del conocido caso “Paulina del Carmen Ramírez Jacinto”, donde el Estado de México fue declarado responsable de violar los derechos humanos de la menor al impedir se realizara un aborto puesto que la menor de por entonces 14 años había sido violada, algo que está contemplado en la legislación de ese país. El caso culmino con una solución amistosa.
“Son sólo problemas de mujeres” explicó Mejía y luego explicó porque “el aborto legal no es contrario a la Convención”. En este sentido apuntó al artículo 4 de la Convención Americana de Derechos Humanos donde se fija “el derecho a la vida”. Allí se establece que “en general, desde el momento de la concepción”. Para la relatora, este “en general” marca que “no puede ser interpretado de una manera restrictiva”.
Mientras realizaba esta exposición una mujer comenzó a los gritos porque consideraba que la representante de la CIDH se encontraba “manipulando” en su decir. La mujer fue retirada de la sala a pedido del presidente de la Comisión. Tras la interrupción volvió a expresar la necesidad que “la salud reproductiva de las mujeres debe tener un lugar prioritario en la legislación”.
Tras la exposición llegaron las preguntas de los diputados, a cada palabra parecía que un aplauso a veces aprobando y otras de manera irónica continuaban. Principalmente un grupo de antiabortistas identificados con la legisladora Cynthia Hotton (Valores para mi País) eran quienes mediante vociferaciones y aplausos interrumpían constantemente los dichos de la relatora.
La primera en preguntar fue Ivana Bianchi (Peronismo Federal) quien le preguntó que pensaba sobre la objeción de conciencia y luego de manera poco respetuosa intentó desacreditar a la visitante. A lo que Mejía le contestó: “estamos acostumbrados a participar en debates acalorados” y asimismo advirtió que “recibió una gran cantidad de mails irrespetuosos y agresivos”.
Luego al respecto de la Clausula de Conciencia explicó que “cuando la vida de la mujer corre riesgo por falta de atención… allí cede el derecho de la objeción”. A lo que agregó que las “causas de aborto” son las que mayor cantidad de muertes genera en el marco de las muertes por “falta de acceso a la salud materna”.
Asimismo Mejía aclaró, tras una pregunta de la diputada Victoria Donda (Libres del Sur), que en la región “las muertes por aborto clandestino” son una de las razones de más alto porcentaje y que principalmente tiene que ver con mujeres pobres, campesinas e indígenas.
Cabe recordar que Donda previo a realizar la pregunta contó que fue agredida en las afueras del anexo de la Cámara de Diputados por fue agredida por un grupo de personas que se manifestaban sobre calle Riobamba en contra del aborto y tuvo que ser rescatada por la policía que custodia el edificio anexo.
La jornada cerró con canticos, esta vez de quienes están a favor de la despenalización del aborto y que no había participado durante la reunión. Pudo escucharse consignas como “aborto legal para no morir” o “nosotras parimos, nosotras decidimos”. El debate recién comienza.