Las tormentas que devastaron a la ciudad bonaerense de La Plata dejaron un saldo oficial de 52 muertos y causaron uno de las mayores tragedias de su historia. Debido a las inclemencias del tiempo y la falta de obras públicas para hacer frente a una catástrofe semejante, las empresas y organismos públicos, así como la sociedad civil en general, debieron reorganizar sus esquemas para tratar de volver a la normalidad
En orden a normalizar el servicio de Justicia, los integrantes de la Suprema Corte de Buenos Aires (SCBA) tomaron una serie de medidas. Recién el pasado miércoles 10 se finalizó con reapertura de todos los juzgados, donde las actividades habían sido suspendidas.
Por este motivo decidieron decretar la suspensión de términos en juzgados de Familia 1, 2 y 3, la Cámara en lo Contencioso Administrativo, la Secretaría Penal y la Delegación de Administración del Departamento Judicial de la Plata, algunos de los espacios que fueron más afectados por la tormenta por las zonas en las que se encontraban. Estos lugares, aún cuando ya había dependencias funcionando nuevamente, había quedado realmente destrozados.
A la hora de tomar la decisión, los jueces consideraron la opinión del Colegio de Abogados departamental, desde donde expresaron “preocupación respecto a la afectación sufrida por los profesionales que se encuentran impedidos de desempeñar en forma normal su actividad, requiriendo que sean consideradas las situaciones particulares de quienes vean limitadas sus tareas profesionales”.
Por este motivo, también decidieron disponer que en todos los juzgados y dependencias se contemple el requerimiento de los abogados que planteen problemas para el normal desarrollo de su actividad y que merezcan una suspensión de plazos especial de acuerdo a cada caso en particular.
Como medida adicional y teniendo en cuenta que muchos estudios jurídicos perdieron sus archivos y desde el Máximo Tribunal provincial decidieron “disponer que todos los Órganos Jurisdiccionales del Departamento Judicial de La Plata agilicen el trámite de préstamo de expedientes a los abogados intervinientes, a fin de que en el lapso de 24 hs procedan a extraer fotocopias de los mismos”.
Después del temporal, las sedes del Poder Judicial que se vieron más afectadas sufrieron una grave pérdida de expedientes, que se arruinaron con el agua y quedaron irrecuperables. Sobre todo teniendo en consideración la gran cantidad de problemas que hay en este sentido en la provincia de Buenos Aires, donde los archivos superan ampliamente la capacidad de almacenamiento.
dju
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