El año pasado, la Cámara Baja de Buenos Aires comenzó el tratamiento de un proyecto que buscaba crear un tribunal imparcial autárquico para resolver conflictos sindicales. Esta iniciativa había sido bien recibida por legisladores de diferentes bloques, pero la reticencia se dio en el plano más importante: el de los representantes de los trabajadores.
Es por eso que el presidente de Diputados, Horacio González, decidió llevar a cabo un encuentro con sindicalistas para discutir al respecto, buscando que el proyecto se impulse. La idea surgió a raíz de los profundos conflictos que se dieron por el paro de los docentes en la provincia, y esta iniciativa surgió desde el oficialismo.
La discusión se había iniciado en la Cámara Alta, y partía del presupuesto de que la Constitución provincial, en su artículo 39, establece la creación de un tribunal arbitral para llevar a cabo la solución de conflictos sindicales.
La media sanción no tardó en llegar, y las expresiones de apoyo, a pesar de las disidencias durante el debate, llegaron de todos los sectores: Roberto Costa, titular de la bancada del Frente Renovador, aseguró entonces que llegaba de esta forma una ley “con veinte años de atraso”, en relación a su inclusión en la Carta Magna provincial durante la última reforma de 1994. Por su parte, Carlos Fernández, de la UCR, se mostró conforme con la media sanción.
La reunión con Horacio González puso paños fríos al avance de la iniciativa: los gremialistas no se mostraron conformes con un tratamiento de esta propuesta sin su opinión. Si bien el titular de la Cámara Baja aseguró que hubo vocación de diálogo como el punto principal del encuentro, los integrantes de diferentes sindicatos opinaron con dureza al respecto.
La Central de Trabajadores Argentinos (CTA) de Roberto Baradel aseguró, a través de un comunicado, que “no comparte en absoluto la composición y facultades otorgadas al organismo”, y que ese “tribunal arbitral se aleja de la imparcialidad en la que fue sustentada en el artículo de la Constitución de la provincia de Buenos Aires de 1994”.
Oscar de Isasi, de la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE) de Buenos Aires, reclamó que “se convoque a un ámbito para construir entre todos el Organismo Imparcial, ya que el proyecto actual tiene un mal de origen, que es su carácter inconsulto”.
La normativa establece que "el Organismo será competente para entender en los conflictos colectivos que se susciten entre trabajadores estatales y el estado provincial y estará habilitado para intervenir a solicitud de las partes una vez agotado el procedimiento de auto composición previsto en las normas de negociación colectiva general o especial y fracasado el de conciliación obligatoria que determina el establecido en la Ley 10.149 y modificatorias y/o las que en el futuro las reemplacen".
El organismo "autónomo y autárquico" contará con nueve integrantes: "Siete conjueces de la lista que lleva la Suprema Corte de Justicia de la Provincia de Buenos Aires, un Abogado de la matrícula con especialidad en Derecho Laboral y un representante académico con reconocida trayectoria en materia laboral".
dju
Estimado colega periodista: si va a utilizar parte esta nota o del fallo adjunto como "inspiración" para su producción, por favor cítenos como fuente incluyendo el link activo a http://www.diariojudicial.com. Si se trata de una nota firmada, no omita el nombre del autor. Muchas gracias.