Se trata de una causa en la que se encuentran imputados 11 taxistas, (nueve de ellos detenidos) por los delitos de asociación ilícita agravada, amenazas calificadas, coacción, lesiones leves calificadas y daños, por intentar "monopolizar con exclusividad el traslado de los pasajeros" del aeropuerto Taravella, de la Ciudad de Córdoba. El fiscal que lleva a cabo la pesquisa, Pedro Caballero, requirió la elevación a juicio del expediente, sosteniendo que esta "mafia” funcionaba desde el año 2006 y que sus integrantes habrían cometido "numerosos ataques y amenazas contra aquellos trabajadores del volante que intentaban acercarse al aeropuerto para buscar pasajeros".