Tal como se preveía, la Cámara de Diputados aprobó un proyecto de ley para la investigación médica y científica del uso terapéutico de la planta de cannabis y sus derivados. Los legisladores rechazaron la inclusión de un artículo para permitir el autocultivo personal o familiar.
Por 221 votos a favor y ninguno en contra, la Cámara de Diputados de la Nación aprobó un proyecto de ley que establece un marco regulatorio para la investigación médica y científica del uso medicinal de la planta de cannabis y sus derivados, “garantizando y promoviendo el cuidado integral de la salud”.
La iniciativa crea el “Programa Nacional para el Estudio y la Investigación del Uso Medicinal de la Planta de Cannabis, sus derivados y tratamientos no convencionales”, bajo la órbita del Ministerio de Salud.
Asimismo, dispone que la Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica (ANMAT) permitirá “la importación de aceite de cannabis, cuando sea requerida por pacientes que presenten las patologías contempladas en el programa y cuenten con la indicación médica pertinente”, y dicha provisión será “gratuita” para quienes se encuentren incorporados al programa.
El diputado nacional Luis Petri (UCR-Cambiemos) manifestó que “no es la primera vez que el Cuerpo se avoca al tratamiento del cannabis para uso medicinar, ya que en el 2003 se presentó por primera vez un proyecto para regular y eximir de pena”.
En los últimos años se impulsaron una docena de iniciativas, pero ninguna llegó al recinto. “Ante los proyectos, el Estado negó la utilización del cannabis con fines terapéuticos”, sostuvo Petri y concluyó: “Estamos hablando de salud pública y cuidados paliativos”.
Por su parte, la diputada nacional Brenda Austin (UCR- Cambiemos) destacó el "cambio de paradigma" que implica esta ley "no solamente al promover el debate sino por el acompañamiento unánime de todos los bloques". Dentro de las virtudes de la propuesta, la legisladora destacó “la gratuidad en el acceso al cannabis y la responsabilidad del Estado en su provisión".
Y señaló: “Quiero resaltar también la propuesta de construcción del Consejo Consultivo, un espacio que piensa en la integración de estos actores, de las universidades, de las ONGs, de las organizaciones de la Sociedad civil, de los profesionales, como un espacio que sirva para el monitoreo, para la escucha y de alguna manera, también para colaborar en la implementación de esta ley”.
Durante el debate, algunos legisladores apoyaron la inclusión del autocultivo para consumo personal, familiar o un tercero con fines terapéutico-medicinales. Las diputadas por el Frente para la Victoria-PJ Carolina Gaillard y Diana Conti defendieron la postura, por considerar que “el Estado no está inicialmente en condiciones de satisfacer esta demanda”.
No obstante, la Cámara Baja no consiguió avanzar con la modificación del artículo para incluir el “autocultivo y el cultivo cooperativo y solidario”, solicitado por organizaciones de madres y padres de niños con diversas patologías.