Los Consejos Federales de Procuradores y Defensores expresaron al ministro de Justicia y Derechos Humanos de la Nación, Germán Garavano, la necesidad de realizar una serie de reformas al Código Penal en materia de violencia de género. Mediante una nota, plantearon la incorporación de nuevas figuras penales, el agravamiento de otras existentes, y la implementación de tratamientos para los violentos. El documento destacó el "crecimiento de la violencia de género; más allá de los incesantes reclamos de la sociedad en pos de limitar esta constante violación a los derechos humanos, los casos se han incrementado en su número y gravedad", y que hasta el momento "no se reaccionó con una adecuada actualización del derecho penal de fondo, para optimizarlo como mecanismo orientado a confrontar con un flagelo de máxima prioridad".