Un juez de un Tribunal Oral en lo Criminal de Capital Federal se excusó de intervenir en un juicio porque la fiscal que acusó al imputado es su propia esposa. El caso, un hombre llegó a juicio procesado por “homicidio culposo agravado por haber sido ocasionado por la conducción imprudente de un automotor”, mediante un auto de elevación fue firmado por la fiscal Cinthia Oberlander. La causa recayó en el Tribunal Oral en lo Criminal de Capital Federal N°24, que se constituyó en unipersonal, y quedó a cargo del juez Marcelo Alvero, marido de Oberlander. “Advierto que la mentada pieza que servirá de apertura al debate fue suscripta por la Fiscal de Instrucción Cinthia Oberlander, a la sazón mi esposa”, destacó el magistrado. “Con el fin de aventar cualquier tipo de suspicacia, y teniendo presente el espíritu que conlleva al legislador a establecer las causales de inhibición, entiendo que debo apartarme del juzgamiento de este proceso”, justificó el sentenciante.