La Cámara en lo Criminal Federal revocó el sobreseimiento de cuatro médicos acusados en la causa por el contagio de miles de pacientes con HIV, Hepatitis B y C, entre 1979 y 1991 por el suministro de concentrados contaminados. El Tribunal decidió también apartar del expediente al juez federal Claudio Bonadio, quien ratificó el sobreseimiento de los cuatro médicos acusados de mala praxis, por considerar que hubo prescripción de la acción penal. Los camaristas sostuvieron que Bonadio se apartó de lo decidido por la Cámara Federal de Casación Penal que, cuando le tocó intervenir, declaró que la acción no estaba extinguida ya que "el contagio, desde el punto de vista de la responsabilidad penal, es un delito continuado y permanente".