En un nuevo acto de apertura del año judicial, Ricardo Lorenzetti lanzó los lineamientos para “transformar” el Poder Judicial. Llamó a un fuerte debate interno e instó a dar “soluciones concretas” para mejorar "el servicio público" que dan los tribunales. Las definiciones sobre el Consejo de la Magistratura.
El presidente de la Corte Suprema de Justicia de la Nación, Ricardo Lorenzetti, llamó a encontrar “soluciones rápidas y concretas” para una transformación profunda de la Administración de Justicia. Así se pronunció en el mediodía de este martes, cuando en el discurso de apertura del año judicial lanzó los “lineamientos de una política de Estado” para modificar los Poderes Judiciales.
Al iniciar su discurso, ante la atenta mirada de camaristas y jueces nacionales y federales e integrantes del Consejo de la Magistratura, se preguntó cómo debe afrontar la Justicia la dinámica actual. “¿Deben los poderes judiciales actuar conformes a las mayorías? ¿Qué transformaciones necesitamos hacer? ¿Debemos reflexionar sobre el horario judicial?” se preguntó el presidente del Máximo Tribunal.
En el medio de su discurso, en el que presentó ideas como la digitalización total de expedientes, el cambio en la Educación Legal, las reformas del Consejo de la Magistratura, del Código Penal y el Procesal Penal e incluso la extensión del horario judicial, Lorenzetti llamó a “ponerse de acuerdo” en cuestiones “básicas”. “Hace más de 30 años que se discute en el país acerca de mano dura y mano blanda” ejemplificó.
Lorenzetti reconoció que “cualquier persona que hoy tiene un litigio y tiene que pensar que va a durar diez años es una expectativa absolutamente irrazonable” y que había que “cambiar esto”, lo que no se cambia “sólo con los horarios” sino que “con las estructuras, se cambia con las reformas de fondo”.
“Podríamos hacer una referencia a los problemas que encuentra la sociedad en los poderes judiciales. Podríamos mencionar la tragedia del tribunal”, advirtió el supremo, que ejemplificó el concepto con el juicio por la tragedia de Once y la dificultad de encontrar un Tribunal Oral para llevar adelante el debate.
“La tragedia del tiempo, que es otro problema dentro del sistema judicial”, también indicó el presidente de la Corte, que reconoció que “cualquier persona que hoy tiene un litigio y tiene que pensar que va a durar diez años es una expectativa absolutamente irrazonable” y que había que “cambiar esto”, lo que no se cambia “sólo con los horarios” sino que “con las estructuras, se cambia con las reformas de fondo”.
Corrupción y juicios rápidos
Frente a la mayoría de los jueces federales de Comodoro Py, e integrantes de las Cámaras Federales y de Casación, Lorenzetti reconoció los proyectos de reforma del Código Penal y de implementación del sistema acusatorio, pero advirtió que si la aplicación del sistema acusatorio a nivel federal “está planteada como un proceso muy gradual que se va a hacer”, hay que “ser capaces de tomar medidas urgentes, porque los juicios están ahora y los reclamos de la sociedad son ahora”.
Hay que “ser capaces de tomar medidas urgentes, porque los juicios están ahora y los reclamos de la sociedad son ahora”, dijo Lorenzetti, ante la atenta mirada de los jueces federales
Lorenzetti también llamó a que “se elaboren principios de armonización entre la seguridad ciudadana y las garantías constitucionales” y se preguntó si son capaces “de hacer reformas para que la lucha contra la impunidad sea efectiva”
Oralidad Civil y expediente digital
Al referirse a esa materia, el titular de la Corte reiteró que se necesitan “ transformaciones importantes” porque hay un Código Civil y Comercial “pero falta toda la estructura de implementación, es decir: leyes procesales, la oralidad, la infraestructura.”, pero “sobre todo la oralidad”.
“Hay algo central que atraviesa todos los fueros, y es la idea de que el ciudadano que va a un banco, maneja a un celular, está en contacto con el siglo XXI, pero cuando va a un juzgado pasa al siglo XIX. Todavía ve expedientes cosiéndose con hilos", dijo Lorenzetti en su discurso.
“Hay un proyecto que ahora está circulando aquí, elaborado en el Ministerio de Justicia, sobre la oralidad. Hay un proyecto sobre la digitalización y el proceso basado en datos electrónicos, el proceso digital. Hay proyectos importantes en esta materia para mejorar el trabajo en la Justicia civil”, se entusiasmó.
En ese sentido, también llamó a que la Justicia de el salto cualitativo en materia de incorporación de nuevas tecnologías. “Hay algo central que atraviesa todos los fueros, y es la idea de que el ciudadano que va a un banco, maneja a un celular, está en contacto con el siglo XXI, pero cuando va a un juzgado pasa al siglo XIX. Todavía ve expedientes cosiéndose con hilos. Entonces, ¿cómo puede ser que no seamos capaces de lograr expedientes digitales en todos los ámbitos?”, destacó, a la vez sostuvo que el expediente digital “es una urgencia” y exigió “lograrlo en todas las jurisdicciones”.
En materia de acceso a la Justicia, al proponer que los casos sean Juzgados “de manera sencilla” y que los jueces estén en los lugares donde esá el conflicto. Dio el ejemplo de Brasil, que tiene un sistema en el cual la Corte puede crear tribunales y los creó en el aeropuerto. “¿Por qué? Porque hay conflictos en el aeropuerto. ¿Y ese tribunal es un tribunal complejo? No, es un tribunal que llama a las partes y busca soluciones en el momento, oral”, agregó.
Reforma del Consejo de la Magistratura
En este último aspecto, y siguiendo con la misma línea, el presidente de la Corte llamó a ponerse de acuerdo en materia de la reforma del organismo que tiene entre sus tareas seleccionar y sancionar a los magistrados.
¿Cómo es posible que todavía discutamos la Constitución? ¿Cuántos miembros tienen que ser y cuántos sectores tienen que estar representados? Todavía hay varios proyectos distintos. ¿No es posible que nos pongamos de acuerdo? Porque si no resolvemos esto, esta institución no nos satisface y entonces tenemos graves problemas”, dijo el presidente de la Corte en relación a la reforma del Consejo de la Magistratura
“¿Cómo es posible que todavía discutamos la Constitución? ¿Cuántos miembros tienen que ser y cuántos sectores tienen que estar representados? Todavía hay varios proyectos distintos. ¿No es posible que nos pongamos de acuerdo? Porque si no resolvemos esto, esta institución no nos satisface y entonces tenemos graves problemas”,se quejó Lorenzetti de la situación, para la que el Tribunal que preside tiene la posiblidad de alterar: se encuentra en la Corte la definición por la inconstitucionalidad o no de la actual conformación del Consejo.
Al finalizar el acto, Lorenzetti abogó por “trabajar fuertemente en mejorar el servicio público que brindan los tribunales” lo que “significa que nosotros tenemos que tener una actitud más abierta”.
“Si cambian las costumbres, si debemos cambiar el horario, bueno, hagámoslo: no puede ser una cuestión tan difícil. O trabajar de otra manera, de manera que los ciudadanos tengan servicios continuos”, resumió.