Un hombre deberá ser indemnizado el accionar de un agente policial que se encontraba con su arma reglamentaria y fuera del servicio. El funcionario le pegó un culatazo en la cabeza y le disparó en el pie.
La Cámara de Apelaciones en lo Civil y Comercial de Resistencia confirmó una demanda por los daños que sufrió a un hombre por el accionar de un agente, quien se encontraba con su arma reglamentaria y fuera del servicio.
Todo comenzó cuando el personal policial le pidió a su vecino -parte actora- y sus amigos que bajaran el volumen de la música. Tras el hecho, el hombre amenazó a la mujer del agente con un arma de fuego. Cuando el policía regresó de trabajar y se enteró del suceso, decidió encarar a su vecino. Allí le propinó un culatazo en la cabeza y le disparó en el pie derecho con su arma reglamentaria.
La sentencia de primera instancia hizo lugar a la demanda por la suma de $14.000 en concepto de daños y perjuicios, con más intereses. Todo ello en los autos “C., S. J. C/ F. M., J. T. y/o Policía de la Provincia del Chaco y/o Gobierno de la Provincia del Chaco y/o Quien Resulte Responsable S/Daños y Perjuicios y Daño Moral”.
En este escenario, el Tribunal de Alzada confirmó que el Estado es “responsable por el hecho delictivo perpetrado por el agente policial con un arma de la repartición y fuera del servicio policial”, ya que sus “deberes de conducta y el arma a su cargo están destinados a dar seguridad a los habitantes y su uso en perjuicio de ellos revierte la responsabilidad civil en el Estado”.
“(...) Resulta indiscutible la existencia del nexo de causación adecuada para la producción del ilícito, entre éste y la condición de policía del victimario, así como la responsabilidad del Estado por el hecho del agente”, añadió el fallo.
De este modo, los jueces concluyeron que el policía tomó la decisión personal del demandado de ir en busca de quienes amenazaron a su familia “en lugar de efectuar el procedimiento que correspondía y que no era ignorado por el funcionario policial”.
Los camaristas también rechazaron el argumento del demandado respecto a que su esposa había sido amenazada de muerte por el actor. En este sentido, señalaron que el policía “no realizó el procedimiento correcto de denunciar ante la Comisaría más cercana sobre las amenazas inferidas a su esposa, con lo cual su conducta hizo un uso desproporcionado e injustificado de su condición de agente”.
En ese contexto, los camaristas subrayaron que los hechos “tuvieron su inicio en una decisión personal del demandado de ir en busca de quienes amenazaron a su familia en lugar de efectuar el procedimiento que correspondía y que no era ignorado por el funcionario policial”.
De este modo, los jueces concluyeron que el policía tomó la decisión personal del demandado de ir en busca de quienes amenazaron a su familia “en lugar de efectuar el procedimiento que correspondía y que no era ignorado por el funcionario policial”.