La Justicia investiga si la ex secretaria de Medio Ambiente, Romina Picolotti, su hermano, y un hombre cercano al ex jefe de Gabinete kirchnerista Aníbal Fernández, el contador Lucas Gancerain, pidieron y/o recibieron coimas en el marco de una licitación por obras en el Riachuelo. La causa se abrió a raíz de una de las confesiones en la causa de los cuadernos de la corrupción. Uno de los imputados es uno de los empresarios que admitió haber pagado sobornos a la asociación ilícita que recaudaba con los negocios del Ministerio de Planificación. La lupa está puesta en las palabras de Miguel Marcelino Aznar, presidente de Decavial SA, empresa que tenía la concesión de la Ruta 9 entre Campana y Rosario. En diciembre, Aznar tuvo que volver al juzgado de Claudio Bonadio para declarar en indagatoria en el marco del capítulo que investiga a los concesionarios viales, donde también fueron imputados Franco y Gianfranco Macri, padre y hermano del presidente Mauricio Macri.