A horas del veredicto definitivo (el miércoles se conocerá la sentencia), el juicio por el femicidio de Jéssica Norma González va tomando color: hoy se escucharon tres testimonios relevantes, el principal, el del médico forense que tuvo a su cargo la autopsia de la víctima: relató que fue al motel el 21 de septiembre de 2018 (día del femicidio) y observó el cuerpo de la víctima, que aún se encontraba en el suelo. Dijo que la mujer se encontraba vestida y que le llamó la atención que aún tenía la correa de la cartera apoyada en el hombro. Mañana declararán los últimos testigos y el miércoles se conocerá la condena que recibirá Raúl Antonio Pérez, acusado de matar a la mujer en un hotel alojamiento el año pasado. Jéssica presentaba múltiples puñaladas en el esternón y en el tórax. También en la región axilar, abdomen y en las palmas de las manos (compatibles con acciones de defensa), según detalló el profesional. La muerte se produjo en forma casi inmediata por las heridas punzocortantes que afectaron al corazón y a grandes vasos. Para el médico, el resto de las lesiones serían post mortem o con la víctima ya en agonía.