Los fiscales del fuero federal le hicieron llegar al Procurador General de la Nación, Nicolás Becerra, la "honda preocupación por las reiteradas amenazas" recibidas por los fiscales Luis Comparatore y Patricio Evers, quienes investigan la responsabilidad penal de policías federales en la muerte de manifestantes el hace un año en el centro porteño, en la jornada que cayó el gobierno de Fernando De la Rúa. Además, los fiscales se manifestaron en "absoluta disposición" para colaborar con sus colegas "en las tareas que lo requieran". Además, los fiscales le pidieron a Becerra que "garantice la seguridad" de Evers y Comparatore. También le pidieron a la Asociación de Magistrados y Funcionarios de la Justicia Nacional que evalúe "emitir un comunicado de orden institucional" para respaldar a los fiscales, que en la últimas semanas sufrieron varias amenazas telefónicas.
Esclavo de sus palabras
En el marco del llamado "Juicio por la Verdad Histórica" por desapariciones durante la última dictadura militar declaró un ex secretario de gremio de los mecánico SMATA, Orlando Armentano, quien se arrepintió de haber colocado la palabra "erradicar" en un convenio que el gremio firmó con la automotriz Mercedes Benz en 1975, para expulsar de la fábrica a los "factores negativos perturbadores". "Me duele haber puesto esa palabra, es fea y mala", dijo Armentano. Tras ese acuerdo y ya en tiempos de la dictadura, de la Mercedes Benz desaparecieron 13 trabajadores, en operativos militares que, se sospecha, tuvieron la colaboración activa de la empresa y el gremio, opuesto a la comisión interna de la fábrica. Los testimonios que sobre este tema se obtuvieron en el Juicio por la Verdad sirvieron para abrir una causa en el fuero federal capitalino que involucra al canciller Carlos Ruckauf y directivos de Mercedes Benz.