A raíz de estos hechos la juez de instrucción en turno María de Milagro Vega, dispuso el secuestro de varios cartones con el fin de lograr determinar que fue lo que ocurrió cuando se realizaron los sorteos.
Además, la magistrada estaría por disponer que la Administración General de Juegos y Seguros le entregue los extractos de los sorteos de quiniela realizados en las últimas semanas para verificarlos con los cartones de todos los denunciantes.
El escándalo se dio cuando el miércoles en las instalaciones del Club Salta Central una gran cantidad de personas se presentaron en las oficinas de la institución para cobrar los premios de un bingo y la organización del mismo, a cargo de Marcelo Castro, les quería abonar premios que eran mucho menores a los montos que ellos habían ganado.
En algunas de las denuncias de los apostadores que acertaron el premio mayor de $800 por que habían completado el cartón con 18 aciertos, se mencionaba que el responsable del bingo “les quiso pagar 25 pesos a cada uno asegurándoles que había más ganadores”, aunque, mencionaban, en el Club sólo había seis personas que reclamaban ése premio.
También, hubo apostadores a quienes se les ofrecían "premios" de 2,50 o un peso, y en un sorteo se llegó a mencionar que había 110 ganadores, a raíz de esto la causa estará en manos de los efectivos de la División de Investigaciones, quienes comenzaron la pesquisa para el secuestro de los cartones y de los extractos .