La presentación del sector menemista se basa en que el Congreso incurrió en desobediencia al no haber acatado la medida cautelar dictada por Servini por la cual se prohibió al máximo órgano partidario eludir las internas y resolver un sistema de “neolemas”, postura que finalmente se impuso en la reunión del viernes último y que es tenazmente resistida por los demandantes.
Ese día, el Congreso oficializó a tres candidatos partidarios para competir en las elecciones presidenciales del 27 de abril próximo: Carlos Menem, Néstor Kirchner y Adolfo Rodríguez Saá, mientras el sector duhaldista presentaba un recurso de apelación sobre la cautelar que la propia juez aceptó, dándole vista a la parte actora.
Por este hecho, los apoderados de Menem solicitaron a la Justicia “un accionar positivo, en términos de cautelar innovativa, como única vía para evitar una lesión irreversible a nuestro derecho”, ante la posibilidad de que “por el transcurso del tiempo y agotamiento de plazos” cualquier medida resulte “abstracta, extemporánea y de cumplimiento imposible”.
“Pedimos la intervención judicial de la Junta Electoral Nacional del Partido Justicialista, y que se instruya al designado a confeccionar un cronograma ajustado a desembocar en la efectiva realización de los comicios (internos) el día 23/02/03, tanto para candidatos a Presidente y Vice de la Nación, como a autoridades partidarias, de conformidad a la convocatoria vigente”, señala un párrafo de la presentación.
Añade que “queda claro que el interventor designado deberá cumplir con todos los pasos necesarios, sin perjuicio de la provisoriedad de los actos que se cumplan, hasta que Vuestra Señoría se pronuncie sobre el fondo de la cuestión y, según el tenor del fallo, tales actos resulten confirmados o desechados”.
A los efectos de la cautela, los apoderados de Menem consideran nula la decisión que adoptó el Congreso de Lanús, pero sus pares del duhaldismo, representados por el abogado Jorge Landau, sostienen que las resoluciones del órgano partidario son soberanas y no deberían ser materia judiciable.
Definieron a la actual Junta Electoral partidaria como una “dependencia del caucus duhaldista” por cuanto fue un hombre del Presidente, el diputado José Díaz Bancalari, “el autor de la ilegal moción finalmente aprobada por el Congreso”.
“Esa misma junta, a la que debían integrarse los representantes de las listas oficializadas, lo que resulta de cumplimiento imposible, por requerirse a tal efecto su designación por las autoridades del Congreso. Tal integración fue largamente postergada y resulta hoy a todas luces incompetente con la posición del Congreso”, dicen.
Giacosa y Ciccia, por cuerda separada, ampliaron también hoy ante Servini los fundamentos por los cuales se exige la realización de internas y pidieron que “se declare mal concedido el recurso” a la Cámara, se “confirme en todas sus partes el fallo apelado” y se “tenga presente la reserva del caso federal” para recurrir ante la Corte Suprema.
Expusieron que existe una “violación al derecho constitucional electoral de elegir y ser elegido, el cual, de acuerdo con lo dispuesto por el artículo 38 de la Carta Magna, no sólo contempla los comicios nacionales, sino también aquellos que en forma interna deben realizar los partidos políticos para elegir a sus candidatos a ocupar cargos públicos”.
Cuestionaron además la legitimidad de Landau para representar al partido en los términos que lo hizo y afirmaron que su apelación “carece del más elemental rigor jurídico, limitándose a efectuar simples afirmaciones dogmáticas sin sustento legal” que en definitiva “demuestra un raro desconocimiento del derecho”.
Señalaron que la cautela otorgada por Servini “no se inmiscuye en el ámbito de reserva del Partido Justicialista, sino intenta frenar las ilimitadas ambiciones del poder del sector interno que el letrado representa, que no vacila en pisotear la Constitución y las leyes para satisfacer tales desbocadas ansias, como quedó demostrado en la reunión del viernes 24 de enero del corriente, en la que un regimentado grupo de congresales in caucus dirigidos por el Presidente de la Cámara de Diputados no vaciló en incumplir abiertamente la demanda judicial”.
“Así, los fundamentos invocados por el fallo de la Juez se asientan en el texto constitucional y cuestionan el plan de Duhalde para el Congreso Justicialista con argumentos de mayor jerarquía que la mera voluntad de una mayoría circunstancial que supone que, por serlo, puede decidir cualquier cosa. Suposición errónea: lo que decida debe estar en el marco de la Constitución y las normas que lo reglamentan”, añaden.
Giacosa adelantó hoy a Diariojudicial.com, en un reportaje que será publicado mañana, que “las maniobras del duhaldismo son una suerte de manotazo de ahogado porque saben que Menem está en condiciones de ganar en primera vuelta”; en tanto que Landau piensa que todavía no se agota una solución por la vía partidaria.