De manera preventiva, un juzgado dictó medidas para que evitar que se viralicen videos íntimos de una mujer. Se habían conocido con el denunciado por redes sociales y luego de mantener conversaciones, la denunciante advirtió las amenazas y se contactó con la justicia.
El Juzgado de Paz de Cipolletti, provincia de Río Negro, dictó medidas para proteger la honra y la dignidad de una mujer que conoció a un hombre por redes sociales, intercambiaron algunas imágenes y como la relación no prosperó la denunció con difundir contenidos íntimos.
Según los detalles de la causa, la mujer, luego de una serie de intercambios por WhatsApp con el hombre denunciado, envió un mail al Juzgado porque el tenor de la charla le sembró dudas y sospechas. Entonces escribió una primera consulta y luego adjuntó las capturas de la conversación.
La titular del juzgado advirtió que estaba frente a un tipo de violencia de género, la digital, tomó medidas y le ordenó al denunciado el cese de todo acto de perturbación o intimidación directa o indirecta respecto de la mujer y también dispuso que se abstenga de publicar fotografías, videos y comentarios que afecten a la denunciante en su integridad moral y emocional mediante la utilización de redes sociales, mensajería instantánea y telefonía celular.
La resolución emitida por la justicia sostuvo que "el hombre demostró una conducta desaprensiva hacia la mujer en general y a la denunciante en particular. Que esas conductas han sido toleradas por la sociedad durante mucho tiempo e invisibilizadas, lo que genera la sensación de impunidad a quienes la perpetúan".
En función de esos argumentos y a la “debida diligencia” que tiene el Estado por ser parte de convenciones internacionales, la magistrada explicó que sus decisiones tienen por objetivo “hacer una revisión de la propia conducta” y visibilizar la problemática.
Además de que el hombre tiene prohibido viralizar el contenido intimo que le llegó en función del intercambio que tuvo con la víctima, deberá en forma obligatoria realizar un curso virtual de capacitación y sensibilización en Género y Violencia.
También fue instado a realizar tratamiento psicoterapeutico con el objetivo de modificar patrones de conducta violentos o de deslegitimación a la mujer.