Juraron los nuevos integrantes de la Corte Interamericana para el período 2022-2027. Se trata e Nancy Hernández, costarricense; Verónica Gómez, argentina; Patricia Pérez Goldberg, chilena y Rodrigo Mudrovitsch de Brasil. Tres de las nuevas juezas son mujeres, en un espacio que sólo ha tenido cinco en sus 40 años.
Con el inicio del año judicial interamericano, se realizó la jura en su cargo de los nuevos jueces de la Corte Interamericana de Derechos Humanos para el período 2022-2027.
De este modo, asumió Nancy Hernández López de nacionalidad costarricense; Verónica Gómez de nacionalidad argentina; Patricia Pérez Goldberg de nacionalidad chilena y Rodrigo Mudrovitsch de nacionalidad brasileña.
Verónica Gómez es abogada y traductora por la Universidad de Buenos Aires y realizó estudios de posgrado en la Universidad de Nottingham (Reino Unido). Actualmente, preside el Global Campus of Human Rights, como también se desempeñó como especialista principal en la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) de la OEA por más de una década y también fue consultora del Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD).
En la ceremonia de apertura y jura también participó la expresidenta de la Corte Interamericana, Elizabeth Odio Benito, el exvicepresidente, Patricio Pazmiño Freire y el exjuez Eugenio Raúl Zaffaroni.
"Asumo, esta gran responsabilidad con total humildad y con el compromiso de dar lo mejor de mí para guiar a esta institución, que cobija al mismo tiempo las angustias y esperanzas de las personas de nuestra América", destacó el presidente de la Corte, Ricardo Pérez Manrique.
Respecto a la paridad de género en la integración del tribunal, el presidente recordó que "la impartición de justicia tanto nacional como internacional, debe construirse sobre la base de un adecuado balance entre hombres y mujeres". "Paridad es reconocer que las mujeres tienen el derecho a estar plenamente representadas en los espacios de toma decisiones", destacó.
Y agregó: "Junto a mi estimado colega Humberto Antonio Sierra Porto, quien me acompañará como Vicepresidente, queremos hacer de la Corte Interamericana, un Tribunal abierto y cercano a la gente y sus diversos actores, con oídos y ojos bien atentos para conocer e interpretar la compleja situación de la región. Para oír a quienes no tienen la posibilidad de ser escuchados, a las personas en situación de vulnerabilidad, que son millones en la región".
Respecto a la paridad de género en la integración del tribunal, el presidente recordó que "la impartición de justicia tanto nacional como internacional, debe construirse sobre la base de un adecuado balance entre hombres y mujeres". "Paridad es reconocer que las mujeres tienen el derecho a estar plenamente representadas en los espacios de toma decisiones", destacó.
En cuanto a la interrelación entre los derechos humanos y el desarrollo sostenible, el magistrado resaltó que "como Corte Interamericana no estamos ajenos a la Agenda 2030, como tampoco lo deben estar los jueces y juezas nacionales. Las crisis producto del cambio climático, la crisis de migración, la inseguridad ciudadana y violencia contra la mujer, entre otras grandes problemáticas, requieren abordarse con una perspectiva que integre los objetivos de Desarrollo Sostenible".
Sobre la situación de millones de personas migrantes en diversos países del continente, concluyó que estas personas "siguen enfrentándose a la estigmatización, las desigualdades, la xenofobia y el racismo generalizados. Las mujeres y niñas migrantes enfrentan un mayor riesgo de violencia de género y tienen menos opciones para buscar apoyo. Nuestra América debe abordar el tema de las migraciones de manera urgente, solidaria, multilateral y a la luz del derecho internacional de los derechos humanos".