De ese modo, las partes llegaron a un acuerdo en el marco de la disputa legal que llevaba casi dos años, a raíz de que la IFB, demandó al ciber café por los daños causados por la práctica antes mencionada.
Si bien en un primer momento la cadena, propiedad del empresario griego, Stelios Haji-Ioannou, había anunciado que iba a apelar un fallo judicial adverso, finalmente llegó a un acuerdo por el cual pago 80.000 libras en daños y perjuicios más los costos legales de IFB, lo que elevó el total a 210 mil libras.
A principios de año, un juez de un alto tribunal de Gran Bretaña Peter Smith declaró a Easy Internet Cafe culpable de infracción de los derechos de autor por permitir a sus clientes descargar música de Internet y copiarla en un disco compacto.
El ciber café suspendió el servicio comercial por el litigio en septiembre del 2001 citando razones comerciales y cuando fue a la justicia estimó que “no debería ser responsable de que los clientes descargaran materiales protegidos por derechos de autor”, pero tales dichos no fueron tenidos en cuenta por el magistrado a la hora de dictar la sentencia.