Sobre la base del informe de evaluación y diagnóstico que se presentó a mitad de año y que reflejó las condiciones de precariedad organizacional que padece el Consejo de la Magistratura, el presidente Pablo Mosca presentó un anteproyecto para comenzar a debatir una solución a los problemas y elaborar un nuevo plan estratégico de gestión del organismo.
Las principales propuestas que Mosca acercó a los consejeros se basan en la revisión de toda la normativa reglamentaria, hacer un relevamiento de los objetivos y logros e impulsar un cambio en infraestructura y recursos humanos, siendo esto último el primer punto a implementar.
“Son ideas que forman parte de la lectura que la presidencia ha hecho de algunas inquietudes de algunos consejeros. Se trata de un borrador de trabajo para ir definiendo las necesidades organizacionales y de gestión del cuerpo que se inscriben en ciertos parámetros internacionales de organización pública y en experiencias eficientes que se vienen desarrollando en el país”, expresó Mosca.
Según el anteproyecto que tienen en estudio los consejeros, “el proceso de reforma de la estructura interna del Consejo debe propender a: la modernización de la organización interna; el acceso a información irrestricta y transparente; la implementación de variadas herramientas estadísticas y hermenéuticas, y la capacitación permanente, continua y concreta de todos los agentes judiciales”.
El que ya hizo eco del trabajo de la presidencia fue el senador Ernesto Sanz, que remarcó la necesidad de discutir el funcionamiento del Consejo. “Ahora nos vamos a sentir obligados a debatir el organigrama de función”, dijo el consejero radical, mientras que aprovechó la ocasión y agregó: “Yo no estoy conforme con el funcionamiento del cuerpo ni con la relación institucional que tenemos con la Corte, y eso tiene que ver con el organigrama”.
En tanto las conclusiones de la propuesta de Mosca indican que “si el Consejo pretende ser una agencia estatal de origen institucional, para asegurar la independencia de los jueces y la eficaz prestación de los servicios de justicia, deberá apartarse de la tendencia al dispendio de recursos humanos, económicos e institucionales”.
Por su parte, Mosca expresó que su informe busca ser un “elemento disparador que posibilite el diálogo fructífero y reflexivo sobre el diagnóstico presentado y si éste presenta alguna gravedad institucional”. Mientras que, a pocos días de dejar la presidencia, expresó su deseo de que “el plan estratégico de gestión que se ideo desde mi presidencia sirva para orientar para marcar un camino en las gestiones sucesivas”.
dju / dju
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