A pesar que la Cámara de Apelaciones en lo Penal había levantado la suspensión contra el letrado Daniel Amelong, el Colegio de Abogados de Rosario decidió mantener la suspensión hasta el 10 de febrero próximo. Es debido a que el letrado está acusado por delitos cometidos durante la última dictadura militar.
“No hay convivencia sin derecho, no hay derecho sin abogados y no hay abogacía sin ética. El divorcio entre el derecho y la moral suele tener consecuencias catastróficas para la sociedad y para la abogacía. Tenemos entonces en nuestras manos una gran responsabilidad, ya que sin moral el abogado se convierte en un depredador social”, aseguró hace ya cuatro meses Ignacio Del Vecchio, presidente del Colegio de Abogados de Rosario.
Se refería, concretamente, al caso tratado por el Tribunal de Ética de la institución que dirige, en el que los integrantes del órgano decidieron suspender al abogado Daniel Amelong por estar relacionado a la comisión de delitos durante la última dictadura militar de Argentina.
Pero en el medio, una decisión judicial se contrapuso a la voluntad de los encargados de la matrícula del letrado. Es que la Cámara de Apelaciones en lo Penal de Rosario había decidido levantar la suspensión, yendo en contra de lo decidido por el Colegio. Por eso, como respuesta a esa medida, los colegiados decidieron imponer nuevamente la suspensión contra Amelong hasta el 10 de febrero de 2012.
Para justificar su decisión, desde el Colegio se ampararon en el artículo 295 de la Ley Orgánica del Poder Judicial, que impide “formar parte” del Colegio a los que “hubieren sido condenados a pena privativa de la libertad por delitos dolosos y de cumplimiento efectivo” y habilita al Directorio de la institución a “cancelar la matrícula sin substanciación alguna”.
En respuesta a ello, la Cámara en lo Penal de Rosario aseveró que el Tribunal de Ética de la institución no actuó en pleno como lo estima, nuevamente, la Ley Orgánica del Poder Judicial, por lo que la decisión debía ser revocada. También se precisó que Amelong tenía condenas en dos Tribunales Federales que aún estaban en revisión.
Al respecto, Del Vecchio había alegado que "es muy probable que se presente un recurso de inconstitucionalidad de la medida judicial".
En esta ocasión, el pleno del Tribunal de Ética, compuesto por doce miembros, tampoco pudo estar presente. Hubo seis integrantes y se completó con cuatro directores del Colegio de Abogados de Rosario, aunque de esos diez se excusó del debate la presidenta del órgano de la institución, Isabel Fernández Acevedo, ya que forma parte de la querella en una de las causas llevadas adelante en contra de Amelong.
Tres horas duró el encuentro en el que los letrados decidieron, por siete votos contra dos, mantener la suspensión contra el abogado hasta el próximo 10 de febrero.
En ese orden, Fernández Acevedo señaló que "no participé del debate", pero "se adoptó una medida satisfactoria, porque el Tribunal de Ética tiene algo que decir. La determinación será comunicada a todos los Tribunales del país, tanto federales como provinciales, y a los organismos pertinentes, al igual que al propio Amelong".
También aseguró que "la Cámara dijo que no había opinado el Tribunal, y yo como presidenta me sentí aludida, por eso convoqué a la reunión", a la vez que remarcó que la decisión del órgano "no entra en colisión con la Cámara porque dictamos una suspensión preventiva, es una cautelar".