Así lo confirmaron hoy fuentes parlamentarias a Diariojudicial.com quienes recalcaron que la Cámara Baja pivoteará sobre por cuatro causas emblemáticas, sobre las cuales podría acumularse mayor cantidad de pruebas para enjuiciar a los nueve ministros de la Corte.
Se trata de las causas por el atentado a la Embajada de Israel, el rebalanceo de las tarifas telefónicas, la presunta venta ilegal de armas a Ecuador y Croacia y el reciente fallo por el cual seis de los nueve integrantes del tribunal decretaron la inconstitucionalidad del “corralito” financiero.
En la reunión de hoy, la comisión que preside el justicialista Sergio Acevedo admitió formalmente la totalidad de las denuncias en las cuales existen “indicios objetivos y subjetivos” para dar inicio al trámite de juicio político.
Según indicaron los voceros, lo que intentará la comisión es recoger pruebas contundentes y alcanzar el consenso que permita obtener, al momento de reclamar al Senado el enjuiciamiento de los integrantes de la Corte, alcanzar los dos tercios de los legisladores presentes requeridos, al momento en que el pedido sea llevado al recinto.
La letra no escrita apuntaría a evitar en ese sentido roces políticos en causas que involucren a la dirigencias de las fuerzas mayoritarias, con el fin de alcanzar aquella meta, ya que entre las presentaciones son numerosas las que cuestionan las conductas personales de los jueces del Máximo Tribunal.
Buena parte de la reunión de hoy fue de carácter público, pero con posterioridad se pasó a un encuentro reservado, donde se pidió el retiro de los asesores y de los medios de comunicación, por lo que los voceros no descartaron que mañana vuelvan a deliberar a puertas cerradas.
La Comisión de Juicio Político, tras la selección de mañana, iniciará un período de recolección de pruebas –similar a la instrucción en una causa judicial—para luego informarle a los jueces los cargos que se les imputan, a fin de que opten por formular sus descargos.
Durante ese período y mientras dure el proceso, no se descarta que la Cámara solicite la suspensión de los ministros de la Corte, pero ese punto genera controversias ya que la Constitución no establece con precisión cuál de las dos Cámaras del Congreso está facultada para hacerlo.
En tanto, en el cuarto piso del Palacio de Justicia reinaba hoy un clima de “preocupación” que ya no apunta a la realización de nuevos cacerolazos en sus puertas, sino al desgaste que podría provocar en sus integrantes el período que se inicia en el Congreso.
A ello debe sumarse la intranquilidad que generaron las dos amenazas que denunciaron haber recibido el presidente de la Corte, Julio Nazareno, y el vicepresidente Moline O´Connor, a quien una voz anónima le habría advertido que no debía concurrir a la Copa Davis de Tenis.