“Tengo la orden para ingresar por la fuerza al tesoro del banco y llevarme el dinero”, advirtió por teléfono la abogada del trabajador, Alicia Garayo, a una autoridad del banco en Viedma, luego de que el gerente del banco Patagonia le comunicara que el dinero no saldría del corralito.
Garayo, en representación de su cliente, se presentó ayer al mediodía en el banco junto a dos policías uniformados y expuso el caso al gerente. Antes había obtenido una orden de allanamiento y convocado a los medios de prensa, a raíz de que en dos ocasiones había intentado fallidamente retirar los 18 mil pesos correspondientes a su asistido.
Ante la advertencia de la abogada, el gerente le entregó al trabajador lo que le pertenecía, aunque tres meses más tarde y con una devaluación de por medio.
En 1998 el titular de la cuenta, de quien no trascendió el nombre, había sido despedido sin causa de Telefónica de Argentina. En noviembre obtuvo sentencia favorable de la Cámara Laboral y al mes siguiente la empresa hizo el depósito judicial de los 18.128 pesos del fallo.
A pesar de las normas que exceptúan del corralito a las indemnizaciones, el Banco Patagonia, que recibe los depósitos judiciales, se negó en ese entonces a entregarle el dinero al trabajador con el argumento de que este monto debía bancarizarse, como si se tratara de un depósito normal.
En tanto, la abogada anunció que iniciará acciones legales contra el banco Patagonia por daños y perjuicios y lo acusará de retención ilegal de fondos.