La medida alcanza a Moshen Rabbani, ex agregado cultural de la Embajada de Irán en Buenos Aires para la época del atentado. También, el juez libró orden de captura contra Alí Fallahijan, quien para el año 1994 era ministro de Inteligencia y Seguridad de Irán junto a un correo diplomático del ministerio de Relaciones Exteriores de Irán: Barat Alí Balesh Abadi.
En la resolución de 400 páginas, el juez ordenó además mantener la vigencia de la orden de captura nacional e internacional que pesa sobre el ciudadano iraní Alí Akbar Parvaresh, un funcionario iraní cuyo pedido de captura se solicitó inmediatamente después del atentado, gracias al testimonio del disidente iraní Moatamer Manucher, a quien Galeano entrevistó en Venezuela.
La parte dispositiva de la resolución incluye además 20 apartados, donde se incluyen decenas de pedidos de colaboración internacional a distintos países, como Líbano, Estados Unidos, Israel, Siria, Paraguay, Panamá y hasta la misma República Islámica de Irán, confirmaron fuentes con acceso a la resolución, que fue firmada el 5 de marzo pasado, pero trascendió hoy merced al secreto de sumario.
Fuentes judiciales explicaron que el secreto impuesto sobre la causa se dispuso para proteger a funcionarios del servicio diplomático argentino.
En la extensa resolución, el juez describe las actividades del grupo fundamentalista Hezbollá en la Triple Frontera entre Argentina, Brasil y Paraguay y postula que el atentado ocurrió en el marco de una “escalada” en el conflicto entre israelíes y árabes en el sur del Líbano.
Fuentes de la fiscalía del caso AMIA consultadas por DiarioJudicial.Com consideraron “insuficiente” la resolución, y recordaron que ellos reclamaron hace pocos días la captura de 17 personas, la mayoría iraníes, a quienes consideraron “ejecutores” del atentado terrorista en Buenos Aires.