“No se presentó y ordené la captura”, confirmó el magistrado a los periodistas acreditados en Tribunales, y enseguida declinó dar mayores detalles sobre la situación procesal del empresario.
El primero de julio pasado, Cruciani ordenó la prisión preventiva de Eurnekián y le otorgó un plazo de cinco días para presentarse, que luego amplió hasta hoy como “último plazo perentorio”. La defensa del empresario apeló la medida ante la Cámara en lo Penal Económico, que aún no resolvió.
“La apelación corre por otro carril” explicaron en el juzgado de Cruciani, para justificar la validez de la orden de captura. La causa se inició por una denuncia de la AFIP “por no declarar como bienes en el exterior las sumas giradas tanto a un fondo fiduciario administrado por el Citi Trust (Cayman) Limited, como aquellas enviadas a Itk Trust Company Limited, ubicada en Las Bahamas”.
El empresario había sido indagado hace dos meses por el juez Julio Speroni –quien subrogaba a Cruciani- por el delito de evasión agravada, y el magistrado le dictó la falta de mérito, pero el ministerio público fiscal apeló la medida y la sala “A” de la Cámara del fuero la revocó, abriendo el camino para el procesamiento.
En este expediente, la AFIP reclama por Impuesto a los Bienes Personales 7.039.287,24 pesos; por Impuesto al Valor Agregado (IVA) 2.870.492,23 y por Impuesto a las Ganancias otros 4.049.502,22 pesos, lo que hace un total cercano a los 14 millones de pesos.