Dos periodistas del diario “The New York Times” se negaron a cumplir una orden judicial del juez Thomas Penfield Jackson que los obligaba a revelar las fuentes de información de un artículo sobre el científico Wen Ho Lee, sospechado de ser espía, quien interpuso una demanda al Gobierno federal de EEUU por violar la ley de la privacidad al haber filtrado información a cinco periodistas. Los trabajadores se ampararon en la Primera Enmienda de la Constitución, que trata sobre la libertad de expresión y de prensa, para no dar la información que el juez había solicitado. En tanto, grupos defensores de los derechos civiles avalaron la actitud de los reporteros y entendieron que la orden del juez Jackson viola el derecho a la libertad de prensa porque obligar a los periodistas a revelar sus fuentes destruye la credibilidad y la independencia de su trabajo.
Música libre
El Supremo Tribunal de Holanda entendió que el servicio “on line” de descarga de musica Kazaa no viola las leyes de propiedad intelectual, hecho que significa un duro golpe para la industria discográfica, que trata de cerrar los sitios de intercambio de archivos. “La victoria de Kazaa establece un importante precedente por la legalidad del software P2P (peer-to-peer), tanto en Europa como en otras partes del mundo”, expresaron los abogados de Kazaa, Bird & Bird, mediante un comunicado. La sentencia de este tribunal, la instancia judicial más importante que se ha pronunciado hasta ahora sobre esta cuestión, establece que no se puede responsabilizar a los desarrolladores de software del uso que de él hacen los individuos.
Pena de muerte
El Poder Ejecutivo de India impulsó un proyecto de reforma a la ley de medicamentos en el cual se incorpora la pena de muerte para quienes fabriquen medicamentos falsos o comercien con ellos. Con estas modificaciones se piensa contrarrestar las producción de supuestos fármacos. En este sentido se piensa también crear tribunales especiales para que se dediquen a la investigación y juzgamientos de este tipo de casos. De esta forma el gobierno busca alinearse a lo proclamado por la Organización Mundial de la Salud que inició una campaña contra los falsos medicamentos, cuya producción se expande y multiplica en países del tercer mundo donde los controles de calidad son escasos, y abunda la venta de medicinas falsas con componentes inocuos o perjudiciales.