Destacaron asimismo que “la violencia doméstica adquiere formas, matices y complejidades que no siempre encuentran un único encuadre jurídico o requieren de un determinado proceso judicial para su resolución, por lo que a la desventaja inicial en que suele encontrarse la persona que recurre a la justicia por su agravio, se adiciona la dificultad de determinar la vía legal que resulte acorde a su pretensión o reclamo”.
En esta línea añadieron que dicho acceso “se encuentra dificultado para cierto grupo de personas que se encuentran en circunstancias de especial vulnerabilidad”, ante lo cual es necesario que se adopten cursos de acción para revertir el estado de situación descrito en aras de garantizar de manera efectiva el pleno goce y ejercicio de los derechos reconocidos por la Constitución Nacional e instrumentos internacionales sobre derechos humanos que Argentina suscribió.
De esta forma mediante la acordada 33 los ministros decidieron constituir un grupo de trabajo integrado por magistrados del Poder Judicial de la Nación que serán convocados por el Presidente del Tribunal para que en el término de 60 días elabore el proyecto de una oficina de atención para casos de violencia doméstica, con funcionamiento las 24 horas del día, todos los días del año, que garantice el efectivo acceso a la justicia de los peticionarios y provea a los jueces de los recursos necesarios para ejercer plenamente su labor jurisdiccional.
Para ello se ha designado a Analía Monferrer, (Prosecretaria Jefe) para que actúe como coordinadora del grupo de trabajo, recopile la información necesaria para sus actividades y elabore semanalmente los informes de progreso que permitan al Tribunal evaluar los avances de la gestión.
Por último, el Presidente del Tribunal podrá invitar a integrarse al grupo de trabajo a representantes del Ministerio Público Fiscal y del Ministerio Público de la Defensa.