En ese sentido, aseveró que Lifschitz desde el momento que ingresó a trabajar en el Juzgado Federal Número 9, buscó obtener beneficios de carácte económico, a raíz de que, según argumentó, tomó información privada para luego volcarla en un libro.
Recordemos que Lifschitz se desempeñó por algún tiempo en la instrucción a cargo de Galeano, pero luego de su paso por el tribunal, se encargó de denunciar públicamente irregularidades y omisiones, que según él, se habrían cometido durante la investigación del atentado.
Además, el magistrado -que se encuentra declarando en su cuarta jornada- destacó que el ex prosecretario dijo varias mentiras, entre ellas, la supuesta invención de anónimos con los cuales, según Galeano, se buscó desacreditar pruebas que llevaron a los investigadores hacia los policías bonaerenses.
Asimismo, recalcó que no asumió ningún compromiso político para dejar de investigar la pista de Alberto Kanoore Edul, un ciudadano sirio a quien en primera instancia se le dictó falta de mérito, ratificada por la Cámara el 7 de julio de 2000 quien tenía llamadas realizadas a Carlos Telleldín.