A media mañana comenzó a percibirse el humo por los corredores, el cual alarmó a todos aquellos que trabajan en las cercanías del despacho. Por suerte el incidente no pasó a mayores y fue sofocado rápidamente por los bomberos de la Policía Federal. No obstante, a su paso dejaron todo mojado, ya que, aunque el incendio no pasó de uno de los cortinados, los bomberos mojaron toda la oficina para asegurarse de que el fuego no volviera a iniciarse.
Ente los mojados están los expedientes que el letrado tenía sobre el escritorio, donde se encontraba preparando los asuntos penales que la Corte tendrá a su vista para el acuerdo de mañana martes.