El caso ocurrió en Mendoza, donde una jefa de Hematología de un hospital, y una residente del mismo, fueron imputadas por el fiscal Horacio Cadile por la comisión del delito de homicidio simple con dolo eventual, por haberle aplicado a una paciente, que realizaba un tratamiento contra la leucemia. Según se desprende de la investigación, la médica residente aplicó en la médula de la víctima un medicamento que debe ir por vía endovenosa, lo que le provocó una reacción que, tras pasar por una internación de dos meses en otro nosocomio, le provocó la muerte.