Autoridades de la DAIA se reunieron con el senador Miguel Pichetto para analizar un proyecto de ley que busca reglamentar los juicios en ausencia. En el encuentro el legislador realizó la autocrítica en torno al Memorando de entendimiento con Irán.
La idea surgió a raíz del atentado a la sede de la Asociación Mutual Israelita Argentina, en 1994: juzgar a los presuntos culpables aunque no estén presentes. La idea de un juicio en ausencia suscito, desde entonces, muchas diferencias entre los juristas que se mostraban a favor y quienes aseguraban que se trataba de una violación flagrante a la Constitución Nacional. Ahora, con el apoyo parcial de casi todas las fuerzas políticas parlamentarias, una iniciativa en este sentido podría ser sancionada.
Autoridades de la Delegación de Asociaciones Israelitas Argentinas (DAIA) mantuvieron un encuentro con el presidente del bloque de senadores del Frente para la Victoria (FpV), Miguel Pichetto, donde expusieron los lineamientos generales de un proyecto que busca reglamentar este tipo de juicios.
Las diferencias entre las organizaciones de la colectividad judía con respecto al gobierno saliente se hicieron manifiestas cuando se impulsó un Memorándum de entendimiento con Irán, en relación con el atentado a la sede de la AMIA. Entonces, las diferencias latentes culminaron en una serie de intercambios judiciales y señalamientos con acusaciones graves entre ambas partes.
Sin embargo, Pichetto, en este encuentro, abogó por zanjar parte de esas diferencias: “Coincidimos en que los objetivos del Memorándum con Irán no se concretaron por la falta de colaboración y compromiso de ese país, en el que nunca se lo trató, haciendo imposible avanzar en la investigación del atentado a la sede de la AMIA”.
Las iniciativas en este sentido son varias, y la de la DAIA recoge parte de lo dispuesto en las propuestas de legisladores de diferentes bloques. Pero aun falta que llegue uno de los proyectos más importantes en este sentido, que es el que se está elaborando en la Unidad Especial de Investigación del atentado a la AMIA, conducida desde hace dos meses por el ex senador Mario Cimadevilla (UCR).
En diciembre del año pasado, en declaraciones a la prensa gráfica, el ex legislador consignó su opinión al respecto y explicó que "la Constitución habla de la garantía del debido proceso, pero no de juicio en presencia o ausencia. Y las normas no hablan de que deben estar presentes los imputados".
Cimadevilla afirmó en este sentido que una regulación de la materia también podría servir para "juzgar argentinos acusados por crímenes de lesa humanidad que estén prófugos y mantienen las causas paralizadas. ¿Qué pasaba si Videla se escapaba? ¿No se lo enjuiciaba? ¿No se lo condenaba?"
Lo cierto es que más allá de esta apreciación, esta clase de juicios nunca se realizó en Argentina, ni siquiera en el caso de los militares puesto de relieve por el titular de la Unidad. La propuesta fue defendida por los entonces legisladores de la oposición, en 2013, cuando fue ideada precisamente por la DAIA y la AMIA.
Esta iniciativa fue en respuesta al Memorándum de entendimiento con Irán, y, entonces, desde las organizaciones puntualizaron que de esta forma se podía paliar el problema de la falta de movimiento de los jueces y el hecho de que los imputados se encontraran todos en Irán.