Según un informe de la Unidad Fiscal de Ejecución Penal, hasta el 20 de septiembre de este año, de las 3.007 personas detenidas bajo su supervisión, sólo el 2% está en la modalidad de arresto domiciliario. Asimismo, en el 56% de los casos se otorgó la prisión durante el período de ejecución, mientras que el resto fue durante la instancia de juicio. En relación a los motivos por los cuales se les concedió la detención, en el 40% fue porque eran "madres de niños menores a cinco años o porque tenían un familiar discapacitado a su cargo". Por otro lado, el 30% se trató de "personas enfermas que no podían permanecer detenidas dentro de la cárcel" y sólo en un 2% de los casos se trató de "enfermos incurables". Un 17% representa a mayores de 70 años y un 11% a detenidos con discapacidad.