Los edificios del fuero del Trabajo parecen de una película de terror. Cortes de luz, amenazas de bomba, y ahora se le sumaron nuevos visitantes: el edificio de Diagonal Norte 760 fue clausurado este viernes por una invasión de murciélagos. Antes, una jueza hizo una denuncia a la Superintendencia de Riesgos de Trabajo alertando los riesgos para el público que concurre a Tribunales.
“Parece una sucursal de Transilvania”, comenta un abogado del foro que litiga en el fuero del Trabajo. Es que a la par de jueces, abogados, funcionarios judiciales, partes y eventuales testigos, ahora se le suman nuevos transeúntes al edificio de la calle Diagonal Norte 760 – que concentra gran parte de los Tribunales Laborales-, pero sin traje ni maletín, sino con alas. Una plaga de murciélagos invadió el edificio.
Ante el riesgo a la salud que eso implica, la jueza Stella Maris Vulcano, titular de un juzgado sito en el edificio y subrogante en otro, hizo la denuncia ante la Superintendencia de Riesgos del Trabajo comunicando los padecimientos que sufren todos los trabajadores del inmueble desde hace días. Lo que de por sí parecía ya un escándalo este viernes, creció exponencialmente con la clausura del lugar. Si el lector no es impresionable, Diario Judicial le recomienda que vea los videos subidos a las redes sociales para comprobarlo usted mismo.
La magistrada había denunciado que encontraron seis murciélagos chicos en el balde que sirve como recipiente contenedor del agua para el aire acondicionado de un despacho, y que también se hallaron esos mamíferos voladores en el medio de un juzgado, en el ascensor del edificio y luego revoloteando en el interior del contrafrente. Los empleados de los pisos más altos tuvieron que cerrar las ventanas, hasta que se decidió desalojar el lugar.
“La gravedad de estos hechos radica en que estos mamíferos voladores resultan peligrosos para la salud, no solo por el peligro de mordedura para los humanos y la posibilidad de transmisión de rabia”, advierte la presentación de la magistrada, a la que tuvo acceso Diario Judicial.
En su escrito, la jueza admite que la mejor herramienta para solucionar el problema es la prevención, pero también aclaró que es necesaria una desinfección semanal. Esta última – reconoce- se viene haciendo, pero aclara que “se debería constatar la efectividad del servicio”.
“Nada de ello se ve aplicado en este edificio y hoy se comprueba, como se relata, esas deficiencias y faltas”, se queja la titular del Juzgado N° 40, y subrogante del 37, y que le solicita al presidente de la SRT, Gustavo Morón, que obligue “en el plazo perentorio que impone la gravedad de la situación”, que haga una inspección al edificio para constatar las condiciones de salubridad e higiene.
“No se puede pasar por alto que las plagas que se verifican en este edificio, no sólo son un peligro para los trabajadores, sino también lo son para los litigantes, abogados, empleados de estudio, auxiliares de justicia y testigos, es decir para la ciudadanía”.
La jueza Vulcano también remitió una copia de su denuncia ante el Colegio Público de Abogados de la Capital Federal. Lo hizo a través de una carta dirigida a su presidente, Jorge Rizzo, y en relación “a lo que pudiera afectar a los señores abogados colegiados y sus dependientes”.