La Justicia Civil condenó a los locadores y el consorcio de propietarios de un edificio por la muerte de una pareja, producto de una intoxicación con monóxido de carbono. El fallo determinó el mal funcionamiento del calefón y la deficiente ventilación del lugar.
Lo que deberían ser unas vacaciones de ensueño para una pareja, se convirtió en una tragedia debido al mal funcionamiento del calefón y a la deficiencia de la ventilación del departamento que habían alquilado en la ciudad balnearia de San Bernardo.
El Juzgado Nacional de Primera Instancia en lo Civil N° 2, a cargo del juez Andres Guillermo Fraga, condenó a los locadores y el consorcio de propietarios, en el marco de los autos “O., L. E. c/P., L. V. s/daños y perjuicios”.
La pericia señaló las deficiencias en la instalación de gas para la evacuación de productos de combustión tanto del calefón cuanto del artefacto cocina. “La rejilla inferior, no estaba comunicada con entrada de aire desde el exterior, alimentaba de aire para combustión a ambos artefactos, siendo ésta una deficiencia de carácter reglamentaria”, advirtió.
Según consta en la causa, las víctimas fueron halladas en el interior del baño ubicado cercano al calefón, con la llave de agua caliente abierta y al máximo, en una situación “compatible con una intoxicación con monóxido de carbono”.
De este modo, el magistrado encuadró la conducta de los locadores en el ámbito de la "responsabilidad objetiva del dueño por el vicio de la cosa” al haberse “comprobado” el mal funcionamiento del calefón e irregularidades de carácter reglamentario. En cuanto al consorcio, el juez les atribuyó la deficiente colocación de las rejillas de ventilación en las distintas unidades funcionales.
En consecuencia, el fallo determinó que los locadores y el consorcio de propietarios son “responsables del hecho dañoso”, pero rechazó la demanda respecto de la empresa que suministra el servicio.