El Colegio Público de Abogados de la Capial Federal, la Asociación de Magistrados y el Gremio de Judiciales respondieron a la convocatoria que hizo la Corte Suprema aportaron sus propuestas de reforma de la Justicia. Todos se niegan a modificar la feria, aunque el CPACF sugiere que haya un doble turno en la atención. Los jueces y empleados advierten: si hay más horas, que haya más sueldo.
Tras el discurso de apertura del año judicial y el lanzamiento del plan de “Lineamientos de una Política de Estado para la Transformación de los Poderes Judiciales”, los sectores representativos de jueces, abogados y empleados judiciales aportaron sus ideas para la reforma de la Justicia, que incluye, entre sus puntos salientes, la aceleración de juicios penales, la posible ampliación del horario judicial y la eliminación de la feria y la oralidad de los procesos civiles.
La feria no se toca
En sus propuestas, tanto la Asociación de Magistrados como la Union de Empleados Judiciales y el Colegio Público de Abogados de la Capital Federal se mostraron reacios a la idea de eliminar la feria judicial.
En ese sentido, desde el CPACF expresaron que los dos recesos se basan “en la necesidad de interrumpir los plazos procesales dos veces al año por cuestiones de descanso y organización interna para el abogado que trabaja solo y que representa una gran mayoría en la matrícula”. La entidad presisida por Jorge Rizzo planteó como excepciones los casos penales, de familia y amparos de salud.
Los dos recesos se basan “en la necesidad de interrumpir los plazos procesales dos veces al año por cuestiones de descanso y organización interna para el abogado que trabaja solo y que representa una gran mayoría en la matrícula
La Unión de Empleados Judiciales de la Nación aseguró que “las demoras y la falta de respuestas del Poder Judicial para con los justiciables no se relaciona con los horarios de trabajo ni con el régimen de ferias de verano o invierno, sino que están íntimamente relacionadas con deficiencias de tipo estructural y organizativas”, por lo que la eliminación de la feria no va a solucionar nada.
Entre las razones de la “tragedia del tribunal”, en los términos de Ricardo Lorenzetti, el gremio comandado por Julio Piumato indicó que “la falta de modernización de los sistemas informáticos y sus permanentes fallas retardan el trabajo de las distintas oficinas judiciales que aún no cuentan con un sistema integral de expediente digital”, como así también que los problemas que existen a diario con el Lex 100, “son un ejemplo claro de las deficiencias en las aplicaciones tecnológicas y su impacto en el retraso del despacho diario”.
Debe promoverse que las partes concurran menos a las mesas de entradas de los tribunales y que reemplacen esas visitas, con la consulta del expediente por vía digital.
En la misma senda, desde la Asociación de Magistrados no advierten que “una modificación en el horario de atención al público o de la feria judicial, logre los beneficios deseados”.
Desde el organismo presidido por la camarista Lilia Gómez Alonso de Díaz Cordero, aclaran que “en el ámbito penal, el horario de atención al público no refleja la cantidad de horas diarias que dura la jornada laboral” ya que “basta con observar el extenso desarrollo de las audiencias orales” o los turnos de los juzgados de instrucción” para dar cuenta de ella.
"Las demoras y la falta de respuestas del Poder Judicial para con los justiciables no se relaciona con los horarios de trabajo ni con el régimen de ferias de verano o invierno, sino que están íntimamente relacionadas con deficiencias de tipo estructural y organizativas”, sostienen desde el gremio de judiciales.
LA AMFJN también se pregunta “si se ha previsto presupuestariamente un incremento salarial para el supuesto de incremento en las jornadas diarias” ya que en caso de avanzarse con la ampliación del horario de atención al público “deberá adecuarse la retribución salarial y mantenerse el mismo porcentaje de diferencia de compensación jerarquía entre empleados, funcionarios y magistrados”, lo que implica “una ampliación del presupuesto asignado al Poder Judicial”.
La solución a este aspecto está en la tecnología, sostiene a AMFJN, que pone de resalto que lo que debe promoverse “es que las partes concurran menos a las mesas de entradas de los tribunales y que reemplacen esas visitas, con la consulta del expediente por vía digital”.
“Ahí es donde debemos concentrar la energía y los recursos. No en medidas que, más allá de lo efectistas que resultan frente a la opinión pública, nada modificarán las graves deficiencias que atraviesa desde hace años el Poder Judicial de la Nación por la falta de atención presupuestaria que ha redundado en un deterioro estructural trascendente”, aseguran desde la asociación, en consonancia con los reclamos del gremio de empleados judiciales.
A diferencia de los anteriores, el Colegio de Abogados propone que haya dos turnos de atención al público en tribunales que se superponen: de 730 a 13:30 hs y de 9:30 a 15:30 hs. Para que los que “no quieran extender su jornada de trabajo a 8 hs diarias” puedan continuar en esos dos turnos, ya sea “manteniendo su actual horario” o “aplazándolo dos horas”. La idea es que se implemente ello en todos los fueros menos el Penal.
Finalmente, los letrados porteños buscan equipararse a sus colegas de la Provincia de Buenos Aires y que se modifiquen el vencimiento en “dos primeras” y que se extienda el “plazo de gracia” a las cuatro primeras horas del día posterior al vencimiento.