Un hombre que causó un accidente de tránsito deberá pagarle a un motociclista una indemnización de casi 3 millones y medio de pesos. En el fallo, la Cámara Civil consideró las secuelas físicas y psíquicas del hecho.
Un conductor deberá pagar una indemnización millonaria a un motociclista como consecuencia de un accidente de tránsito. Así lo resolvió la Sala J de la Cámara Nacional de Apelaciones en lo Civil en los autos “A. D. A. y otro C/ R. D. A. y otro S/Daños y Perjuicios (Acc.Tran. C/Les. o Muerte)”.
El hecho ocurrió el 17 de diciembre de 2012, cuando el demandante iba a bordo de una moto por la Avenida 25 de Mayo de la localidad de Lanús, provincia de Buenos Aires.
Según consta en la causa, el motociclista iba a velocidad reglamentaria, con su casco colocado, luces encendidas y por el carril más próximo a la vereda correspondiente según la dirección del tránsito obligatorio, cuando de una gomería salió el vehículo automotor conducido por el demandado quien lo embistió.
La pericia determinó una "secuela minusvalidante parcial y permanente" que asciende al 37%, pues el actor -que tenía 32 años a la fecha del infortunio- presenta una “marcha rengueante sobre el pié derecho”. También se constató un cuadro por “estrés postraumático con sintomatología depresiva”.
La aseguradora, la demandada y la actora apelaron la sentencia de primera instancia, que hizo parcialmente a la demanda. Puntualmente, el motociclista cuestionó la suma establecida por considerarla reducida, y resaltó la importancia de la “secuela minusvalidante”.
En este contexto, el Tribunal De Alzada consideró probado que el accionante sufrió politraumatismos y contusiones en varias partes del cuerpo, siendo la principal la fractura de la cadera y del húmero. Por las lesiones, el actor debió ser internado alrededor de 30 días.
La pericia determinó una "secuela minusvalidante parcial y permanente" que asciende al 37%, pues el actor -que tenía 32 años a la fecha del infortunio- presenta una “marcha rengueante sobre el pié derecho”. También se constató un cuadro por “estrés postraumático con sintomatología depresiva”.
Además, el accionante registra una cicatriz en forma “tortuosa, gruesa, áspera en su superficie adherida, originada por la cirugía de la fractura y colocación de material de osteosíntesis”.
De este modo, los jueces determinaron una indemnización que asciende a un $1.534.200, más intereses, lo que resulta una condena de casi tres millones y medio de pesos.