La Justicia Federal hizo lugar a una acción de hábeas corpus colectiva interpuesta por el colectivo LGTBI alojado en Ezeiza. Los internos denunciaron el agravamiento de sus condiciones de detención a partir del alojamiento conjunto con varones heterosexuales.
El Juzgado de Primera Instancia en lo Criminal y Correccional Federal Nº 1 de Lomas de Zamora hizo lugar a una acción de hábeas corpus colectiva interpuesta por un grupo de varones gays alojados en el CPF I de Ezeiza por encontrase agravadas sus condiciones de detención a partir del alojamiento conjunto con varones heterosexuales.
La causa se inició por una acción de hábeas corpus contra el Servicio Penitenciario Federal por el agravamiento de las condiciones de detención en el módulo V, pabellón B, del Complejo Penitenciario Federal I. Dicho sector está destinado exclusivamente al alojamiento de personas del colectivo LGTBI.
Sin embargo, ante el crecimiento inflacionario de la población penitenciaria, la Dirección Nacional del Servicio Penitenciario Federal dispuso el alojamiento conjunto de poblaciones de varones gays y heterosexuales en dicho pabellón sin contemplar la voluntad de las personas involucradas.
Según consta en el expediente, los detenidos afirmaron "sentirse atemorizados y desprotegidos ante la convivencia con varones heterosexuales", y que esto produjo cambios en su rutina diaria ya que permanecen mayor tiempo dentro de las celdas, no comparten el espacio común del pabellón y disminuyeron sus salidas a actividades.
En este escenario, el juez ordenó a la Directora a cargo del CPF I “que arbitre los medios que resulten conducentes a los fines de evitar el alojamiento conjunto de poblaciones carcelarias de autopercepción diversa”.
En particular, los internos afirmaron que constantemente son "humillados y denigrados" por su orientación sexual, como así también sufrieron tocamientos y manoseos.
Al tomar conocimiento de los hechos, la Procuración Penitenciaria de la Nación (PPN) se presentó como parte en la acción de hábeas corpus solicitando que se respete la voluntad del colectivo afectado garantizando pabellones exclusivos para los varones gays.
En este escenario, el juez ordenó a la Directora a cargo del CPF I “que arbitre los medios que resulten conducentes a los fines de evitar el alojamiento conjunto de poblaciones carcelarias de autopercepción diversa”.
“Ello así hasta tanto se materialicen efectivas capacitaciones y talleres en consuno con el Instituto Nacional Contra la Discriminación, la Xenofobia y El Racismo, dirigidos a la población general, que acompañen y posibiliten toda medida de integración”, concluyó.