La Comisión de Justicia y Asuntos Penales del Senado debatió el proyecto de ley que busca castigar a quienes realicen denuncias falsas sobre violencia de género.
El proyecto, presentado el año pasado por Carolina Losada y otros legisladores, contiene reformas al Código Penal de la Nación y, entre sus principales puntos, incrementa penas en lo referido a las calumnias y denuncias falsas “cuando el hecho sea cometido en el marco de violencia de género, abuso o acoso sexual o violencia contra niños, niñas y adolescentes”.
A su vez, establece penas de prisión de 1 a 3 años “al que denunciare falsamente un delito ante la autoridad" y “si la falsa denuncia ante la autoridad fuera por delitos de violencia de género, abuso o acoso sexual o violencia contra niños, niñas y adolescentes, la pena será de prisión de 3 a 6 años”.
Para Cúneo Libarona, “la radicalización y la promoción del odio hacia el hombre han habilitado a que en algunos casos se impute falsamente a personas que no habían cometido ningún delito. Al salir a la luz las denuncias falsas, se les resta credibilidad a las denuncias verdaderas”.
Si el falso testimonio se cometiere “en una causa criminal, en perjuicio del inculpado, la pena será de tres a diez años de reclusión o prisión”; “en una causa criminal en el marco de violencia de género, abuso o acoso sexual o violencia contra niños, niñas o adolescentes, en perjuicio del inculpado, la pena se elevará en un tercio en su mínimo y en su máximo que corresponda de reclusión o prisión”; y “en todos los casos se impondrá al reo, además, inhabilitación absoluta por doble tiempo del de la condena”.
En los argumentos del proyecto se lee: “hemos vivido como sociedad la difusión de denuncias a través de medios periodísticos o redes sociales, que condenaron de antemano al acusado, dejando de lado la presunción de inocencia que condice nuestra Constitución Nacional en su artículo 18”.
“En muchísimos casos, la condena social frente a casos aberrantes denunciados, oficialmente o no, contra la integridad de un niño o en el contexto de violencia de género, no tarda en manifestarse, aun sin contar con las pruebas suficientes ni el proceso judicial correspondiente”, agrega al respecto.
Finalmente, sostiene que “este tipo de conductas que ponen en marcha el andamiaje de administración de justicia a partir de un hecho falso y generaran consecuencias perjudiciales para la persona denunciada, deben ser hoy días valorados con mayor entidad por la ley penal y sujetos a una conminación de penas más graves”.
El ministro de justicia, Mariano Cúneo Libarona, acudió a Congreso para hablar sobre el proyecto, al que calificó de “magnífico” y expresó: “tenemos un mandato en la sociedad del Gobierno que es ordenar la situación actual en materia económica, de seguridad y no podemos olvidar la situación de la justicia. Hay que sanearla porque hoy está en un desprestigio tremendo. Es una de las instituciones que se encuentra debajo de todo. Una misión que me he propuesto es reconciliar a la sociedad con la justicia".
Para Cúneo Libarona, “la radicalización y la promoción del odio hacia el hombre han habilitado a que en algunos casos se impute falsamente a personas que no habían cometido ningún delito. Al salir a la luz las denuncias falsas, se les resta credibilidad a las denuncias verdaderas”.
“Nunca se ha consagrado y respetado tanto la división de poderes. Nosotros no intervenimos en el Poder Judicial. No tenemos ninguna vocación de hacer y no lo hemos hecho. Nuestro trabajo en el Ministerio de Justicia es darles a los jueces y al sistema acusatorio las herramientas legales para esta ley por eso estamos construyendo en todo el país edificios, internet, medios de pruebas para que los jueces puedan trabajar de forma independiente libre del poder político”, dijo el ministro durante su exposición.
Sobre el proyecto de ley de ley señaló que es “una práctica que se ha vuelto recurrente en nuestro sistema que es la falsa denuncia y el falso testimonio que, a mi juicio, son actos muy perjudiciales para el funcionamiento adecuado del sistema de justicia y que les produce un daño a otros bienes jurídicos, el honor, el patrimonio la vida, la propiedad, etcétera”, y planteó: “Nosotros no podemos tolerar la mentira, el engaño y que se abuse del sistema judicial porque es gratuito y dañar a otros semejantes para obtener beneficios ilegítimos”.
“La falsa denuncia no solo daña a la víctima de esa denuncia mentirosa, sino que vulnera todo el sistema en general y la credibilidad de las instituciones y, en concreto, está en el título vinculado a la administración pública, concretamente la administración de justicia, y esta nueva Argentina que entre todos tenemos la misión de crear, está en un proceso de regeneración moral y restauración del orden de los últimos 100 años y es que no puede tolerarse la mentira al juez, al fiscal, a la policía”, remarcó el ministro.