La doble instancia judicial es un derecho consagrado por el Pacto de San José de Costa Rica, pero no todas las jurisdicciones lo garantizan: en Misiones, recién en el transcurso de este año, la Cámara de Representantes comenzará a estudiar la creación de una Cámara de Apelaciones en lo Penal, fuero que aún no cuenta con un órgano específico de revisión.
Actualmente, la estructura judicial penal de la provincia está compuesta por los juzgados en lo criminal y correccional de menores, los juzgados de instrucción y los tribunales orales, siendo estos últimos los que actúan como órgano de revisión.
De esta manera, al ser los mismos los jueces de sentencia y los de apelación, en muchos casos se ve afectada la imparcialidad de los magistrados, ya que un juez que condena a un imputado pudo anteriormente haber confirmado el procesamiento o la prisión preventiva del mismo.
“Esto provoca un grave trastorno en el servicio de Justicia”, sostiene el diputado Raimundo Pelinski, autor de uno de los proyectos que propone la creación de una cámara de apelaciones penal. Ello, porque varios jueces de los tribunales se excusan de intervenir en los juicios orales porque ya se han pronunciado respeto de algún incidente surgido durante la tramitación del proceso.
Respecto a la forma de incorporar la cámara penal, una propuesta sugiere la disolución de uno de los tribunales orales de la provincia (son dos) y que los jueces que lo integran pasen a formar parte del nuevo órgano de apelación. En tanto que el Superior Tribunal quedaría como instancia de Casación de las sentencias.
El tema ya fue instalado en la agenda de los legisladores luego de un encuentro que mantuvo la diputada Lucila Prates, presidenta de la Comisión de Legislación General, y el presidente del Superior Tribunal de Justicia (STJ), Rubén Uset.
Allí, los representantes del Poder Legislativo y del Poder Judicial hablaron sobre la presentación de un nuevo proyecto que unifique las dos propuestas anteriores destinadas a la creación de un órgano revisor penal. Las mismas habían ingresado en la Legislatura en el transcurso de 2007 sin que se dictaminara al respecto.
Por su parte, la legisladora Prates remarcó que uno de los temas a tener cuenta será el presupuesto, que impondrá limitaciones a la creación de la Cámara.
De todos modos, los detalles comenzarán a definirse con el abordaje de la cuestión por parte de los diputados, que el primero de mayo inician el periodo de sesiones ordinarias 2008.
dju / dju
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