Diario Judicial: ¿Cuáles son los institutos que controlan los juzgados de ejecución penal?
Broullon Sigler: Además de las causas de los internos, controlamos las penas de ejecución condicional, la probation, el régimen de libertad asistida, las medidas educativas y las medidas de seguridad.
Dju: ¿Qué le parece el nuevo proyecto que presentará el Ministerio de Justicia prevé regímenes de control más severos para la libertad condicional y la probation?
BS: Me parece bien. Pero el problema es la implementación. No tanto en la Capital Federal, sino en las provincias.
Dju: ¿Y pueden controlar tanta cantidad de internos y “semi internos”?
BS: Se trata. Trabajamos con la buena fe. Por eso le digo que en provincia es peor, por las distancias, dependemos de los oficiales de prueba. El problema con el proyecto que menciona, es que son muchos los condenados que tienen que cumplir probation o que están en libertad asistida y realmente no creo que haya tantos oficiales para eso.
Dju: ¿Cuántos internos hay en las cárceles federales?
BS: Alrededor de 6000.
Dju: ¿Y cuántos están cumpliendo distintos regímenes como libertad condicional o probation?
BS: En trámite, al mes de diciembre teníamos 9600 causas, de las cuales sobre internos había 1000 y monedas, y el resto es probation, libertad condicional, libertad asistida etc...
Dju: Claro, tres juzgados de ejecución para 9600 causas....
BS: No!!!, son 9600 causas por juzgado!!!
Dju: Pero eso es prácticamente imposible. ¿De qué manera ejercen el control?
BS: A través del Patronato de Liberados. Dependemos de ellos, la ley lo establece.
Dju: ¿Y no cree que debería reformarse ese régimen de control ?
BS: Sí. O en todo caso, volver al régimen anterior. Es decir que las Fuerzas de Seguridad también controlen . Que pase el móvil del servicio penitenciario a cualquier hora por la casa de los que están cumpliendo alguna medida . Porque a veces el asistente social tiene muchas causas y no le da el tiempo. O cuando va a la casa, el condenado no está o fue a trabajar o salió, entonces tiene que ir nuevamente.
Dju: Se dice que los que están afectados al régimen de probation, no lo cumplen.
BS: Sí. Hay un porcentaje que incumple. Pero bueno, hay que revocársela.
Dju:¿Considera que ese sistema es bueno?
BS: No. Habría que implementar más controles, más gente.
Dju: ¿Pero no cree que a efectos de que haya menos presos, la probation es buena?
BS: Lo que pasa es que se desvirtúa, al haber tantos y otorgarla tan ampliamente, termina siendo negativa. Una cosa que puede ser positiva, termina cayendo en el desuetudo.
Dju: La reforma le quita potestades a los jueces para que gradúen las penas. Les fija pautas para que lo hagan en determinados tercios de la escala. ¿Está de acuerdo con eso? ¿Le parece bien que las penas sean mas rigurosas?
BS: Todo depende del caso. Y también del juez de la causa. Hay jueces más blandos que otros.
Dju:¿Cree que cada vez se delinque mas?
BS: Sí y a edades cada vez más tempranas, además hay mucha droga.
Dju:¿Y por qué cree que sucede eso?
BS: En el caso de los reincidentes, por mas que la unidad los haya ayudado en algo a resocializarse, cuando salen, vuelven al ambiente donde han estado. No consiguen trabajo y vuelven a lo de ellos. Salen a hacer lo que saben . Además, la cárcel es su casa.
Dju:¿Usted tuvo trato con los 12 apóstoles?
BS: Sí, los tuve en el motín.
Dju:¿Y qué clase de actitudes toman? ¿Pueden resocializarse personas con esas características?
BS: No creo. Mire, esta gente es muy conflictiva. En realidad para ellos la cárcel es su segundo hogar. Ellos son alguien adentro de la cárcel. Afuera no son nadie. Entonces prefieren estar adentro. Porque ahí tienen cartel. Ellos sufren muchísimo con el anonimato. Sufren cuando no son nadie. Por eso vuelven.
Dju:¿Porqué cree que necesitan llamar la atención? Porqué les hace mal el anonimato de “portarse bien”?
BS: No lo sé, tal vez la vida que han llevado, las condiciones familiares… Pero no soportan el anonimato. Uno se da cuenta de eso enseguida después de hablar con ellos.
Dju:¿Y las condiciones de las cárceles. no cree que eso contribuye a que se formen más delincuentes?
BS: No crea que están tan mal. Los del interior están mejor
Dju:¿Mejor?
BS: Sí, son condenados, por eso están más tranquilos. En Caseros hay muchos procesados. Dju:¿Qué pasa con los casos de HIV? ¿Aumentaron?
BS: No tengo presente en este momento el número, pero creo que la última estadística que mandó hacer el Ministerio de Justicia, dio más bajo de lo que se creía. Lo que pasa es que no sé si toda la población carcelaria del país se prestó al análisis . Las que más colaboraron fueron las mujeres.
Dju:¿Qué mujeres?
BS: Las de Ezeiza. Ellas no pusieron ningún reparo para hacerse los análisis. Pero los hombres no. Sucede que hay mucha gente que tiene miedo de hacerse los análisis para que no le “salte la ficha”. No quieren que se sepa que están enfermos.
Dju:¿Y cuáles son las condiciones de la Unidad 21 (la que funciona dentro del Muñiz)?
BS: Clínicamente es muy bueno.
Dju: Sin embargo, en un momento se denunciaron condiciones deplorables para los presos enfermos.
BS: No, ahora no. La unidad 21 es excelente.
Dju:¿Pero no les faltaban medicamentos?
BS: No, ya no hay problemas.
Dju:¿Aumentó el delito entre las mujeres?
BS: Sí. Sobre todo con la droga. Hay muchas “mulas”. Traen la droga de las fronteras, las encuentran y bueno... se quedan acá.
Dju:¿Hay mucha droga dentro de las unidades?
BS: Sí, hay. Eso es difícil de controlar. Siempre hay alguien de afuera que trae, a veces la familia, a veces algún letrado pícaro.
Dju:¿Volviendo a la situación del fuero, no consiguieron que se agregue algún juzgado más?
BS: No, ningún juzgado. Solo agregaron un cargo de secretario. Nada más. Imagínese con casi 10.000 causas en cada juzgado, se hace lo que se puede. En realidad, tampoco se arreglaría agregando otro juzgado. Se necesita más gente.
Dju: Hubo hace poco un motín en la cárcel de Caseros.
BS: Sí. El de los menores que trataron de escaparse. Pero no fue significativo. En realidad esperábamos un motín para fin de año.
Dju:¿Porqué para fin de año?
BS: Todos los años, para esta época se esperan motines. Ellos piden reducción de penas y se las deniegan. Entonces arman el motín para fin de año, como represalía. Este año esperábamos uno en Neuquen. La Corte Suprema les denegó el pedido de conmutación, aduciendo que debe hacerse en forma individual, no colectiva. En general, en las cárceles provinciales se les concede más, pero en las federales no.
.Dju:¿También tiene que controlar a los menores?
BS: Sí. Tengo menores desde 18 a 21 años.
Dju:¿Y qué se hace con ellos? ¿Tienen algún régimen especial?
BS: Lo mismo que con los mayores. Trabajan, en la unidad 16, en imprenta, zapatería, tareas de carpintería.
Dju:¿Y los que tienen libertad asistida, trabajan también?
BS: Si consiguen trabajo sí, si no permanecen detenidos.
Dju:¿Pero no es el Estado el que les facilita el trabajo?
.BS: No. Se lo tienen que conseguir ellos.
Dju:¿Y lo consiguen? Me refiero a si no existe discriminación por el hecho de ser presos.
BS: No tanto como se supone. En general los hombres consiguen trabajo. Muchos por ejemplo hacen tareas en estudios jurídicos, sobre todo los que estudian derecho. También trabajan en fábricas o en comercios. Y “en blanco”... con certificado y todo. Las mujeres en cambio no tienen tanta suerte. Les cuesta más acomodarse en casas de familia para hacer tareas domésticas.
Dju:¿Cómo reciben las fiestas los internos?
BS: Se deprimen un poco para el 24. Pero en general van las familias a verlos y eso los calma bastante.
Así el juez Brullon Sigler con una singular visión de la situación carcelaria opinó como si trazara una fuerte línea divisoria entre los que están adentro y los que están afuera. Como si conformaran dos mundos totalmente distintos, cada uno con sus reglas, cada uno con sus leyes y sus códigos.