Los legisladores provinciales sancionaron por unanimidad la adhesión a la ley nacional de cannabis medicinal. El gobierno será el encargado de proveer las dosis a los pacientes que se encuentren previamente inscriptos en un registro y no se contempla el autocultivo.
Los legisladores de la provincia de Tucumán aprobaron por unanimidad la adhesión a la ley nacional del uso de cannabis medicinal y ahora depende del Poder Ejecutivo la promulgación y reglamentación de la nueva norma.
Una vez que eso suceda, el Sistema Provincial de Salud (Siprosa) podrá avanzar con la aplicación de la ley nacional 27.350, que establece la creación del programa nacional de estudio e investigación del cannabis medicinal. Todos los pacientes que requieran una dosis deberán inscribirse en un registro nacional y, si las patologías están incluidas en la normativa y se considera adecuado el tratamiento por prescripción médica, tendrán acceso a la medicina de forma gratuita.
La ley nacional 27.350 preve la importación del aceite de marihuana o de cáñamo a través de la Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica (Anmat) y, si bien no contempla el autocultivo, el Conicet y el INTA podrían recibir una autorización para hacerlo "con fines de investigación médica y científica”.
“No puedo negar la necesidad; no hay argumento técnico o legal frente al dolor que genera una enfermedad, y menos cuando se trata de un hijo”, expresó el legislador Claudio Viña durante el debate, donde se encontraban presentes familiares y pacientes que sufren enfermedades crónicas.
Alberto Colombres Garmendia, del bloque Cambiemos, sostuvo que “quienes vemos muchas veces que la medicina tradicional no puede solucionar las dolencias de nuestros seres queridos, tenemos una esperanza muy grande”. Por su parte, el titular de la comisión de Salud, Reneé Ramírez, afirmó que si "no hubiese existido la ley nacional, lo mismo se iba a avanzar" con esta iniciativa.