La juez dio ordenes a personal de su juzgado para que se libre oficio a la Cámara Federal a fin de solicitar que el tribunal de alzada congele los plazos procesales, y evitar así que sea ella misma quien se vea “obligada a paralizar el normal curso de la investigación”, con el consecuente perjuicio para los detenidos, Rohm y el tercero en la jerarquía del BGN, Félix Pando Casado.
La juez está dispuesta a que la Cámara entienda la gravedad del asunto, por eso, explica que la situación en su juzgado se ha vuelto “insalubre”, ya que trabajan con la documentación “colmando los espacios físicos de trabajo, tránsito y ventilación, impidiendo la prosecución de la pesquisa”.
Como muestra de lo grave de la situación, Servini asegura que visitó su juzgado, personal “de la Superintendencia del Edificio acompañado por personal idóneo del Instituto Nacional de Tecnología Industrial, quienes si bien señalaron que no existía peligro inminente de derrumbe, sí hicieron saber que el peso acumulado por la documentación de referencia podría afectar la estructura edilicia”.
En esa línea, Servini asegura que “se siguen recepcionando declaraciones indagatorias” en la causa, lo que hace que se acumulen todavía más papeles.
En la causa está detenido desde el 25 de enero último el banquero Carlos Rohm, a quien la Cámara Federal le confirmó la prisión preventiva el 15 de julio, por el delito de asociación ilícita en grado de jefe. En el mismo fallo, le ordenó a la juez profundizar la investigación algo que, avisa Servini, no puede concretar por el mar de papeles en el que se convirtieron sus oficinas en el tercer piso de Comodoro Py 2002.