La norma alcanza a los mayores de 75 años que sean titulares de un depósito anterior a la entrada en vigor del corralito, los enfermos (o titulares de cuentas con familiares que requieran tratamiento médico impostergable) y aquellas personas que desde el 1 de julio de 2000 hubieran recibido indemnizaciones o pagos no periódicos de similar naturaleza en concepto de desvinculaciones laborales e indemnizaciones y seguros de vida por fallecimiento, incapacidad o accidente.
En todos los casos, el tramite para obtener la excepción deberá realizarse en la entidad financiera donde estén depositados los fondos. Los bancos tendrán un plazo máximo de cinco días desde que se haya completado la fecha de presentación para expedirse sobre si acepta o niega el pedido, salvo en el caso de los mayores de 75 años, donde la entidad financiera deberá resolver inmediatamente, ante la sola presentación del documento de identidad.
Sin embargo, debe quedar claro que, en todos los casos, el dinero que sale de la reprogramación de vencimientos no puede cobrarse en efectivo en su totalidad, porque “se acreditaran en cuentas corrientes o cajas de ahorros en pesos, cuya utilización quedara sujeta a las condiciones generales vigentes”, es decir que sólo podrán retirar hasta $ 1.200 por mes en efectivo ($ 300 semanales). Para el resto, deberán utilizar otros mecanismos como tarjetas de crédito, cheques o débitos en caja de ahorro. Como puede verse, más que salir del corralito, lo que se hace es pasar los fondos “exceptuados” a un corral más grande.
Todavía no salió y ya la quieren vetar...
Por otra parte, trascendió que el Fondo Monetario Internacional, a través de un memorandum enviado al gobierno, pidió el veto total o parcial de la ley que introduce modificaciones al régimen de quiebras. En realidad, todavía no hay tal ley, pues el proyecto solo tiene media sanción por parte de la Cámara de Senadores y recién mañana será tratada por Diputados.
Para el FMI, la ley produce daños “al sistema bancario y a la cultura del crédito”. Al parecer, el veto sería una de las condiciones que el FMI pone para el otorgamiento de ayuda financiera.
Tres serían los aspectos de la ley más cuestionados por el Fondo Monetario:
* La ampliación a 180 días del plazo para el período de exclusividad
* La disposición según la cual si en 90 días las entidades financieras no llegan a un acuerdo con los deudores por las acreencias existentes al 30 de noviembre de 2001, deben previsionar la pérdida.
* La eliminación del instituto del cram down o salvataje.