El suspendido juez en lo penal económico, Guillermo Tiscornia, comenzó a afrontar hoy el tercer juicio político de su carrera judicial. El Jurado de Enjuiciamiento empezó a analizar la conducta del magistrado en una causa donde se lo acusa de pedir, a través de su padre, una coima de cuatro millones de dólares a los directivos de la empresa española de juegos de azar Codere, para sobreseerlos en una causa por contrabando.
La audiencia comenzó a las 9 de la mañana con la lectura de la acusación. Luego continuó con el descargo del juez que se extendió por cerca de cuatro horas. El juicio se desarrolla en la sala de audiencias de la Corte Suprema de Justicia de la Nación.
El Consejo de la Magistratura aprobó el inicio del juicio político contra Tiscronia el pasado 9 de agosto. La acusación principal es un supuesto pedido de coimas, a través de su padre, el ex magistrado Agustín Tiscornia, a directivos de Codere para desvincularos en una causa de contrabando que tramitaba en su juzgado. El hecho podría significar también una posible comisión de delitos, señala el pedido de juicio político.
Pero también se lo acusa de otras irregularidades en la tramitación de causas como investigar denuncias anónimas (lo que la Cámara en lo Penal Económico le había rechazado en otras oportunidades), violar el principio de igualdad de los imputados y darle una “indebida e inusitada” amplitud al proceso que se inició por contrabando de zapatillas y terminó en una investigación por contrabando de elementos de bingos.
Para los fiscales, la diputada del Frente para la Victoria Diana Conti, el abogado Santiago Montaña y el diputado radical Feredico Storani, quien no estuvo en la primer audiencia, las acusaciones configuran “un obrar negligente” por parte de Tiscornia.
El suspendido juez dijo en su declaración ante el Jurado que la causa contra Codere “no es un invención caprichosa” y calificó de “falso” que él y el fiscal Miguel Schamun hayan desviado la investigación.
A fines de octubre, Tiscornia presentó su renuncia para evitar el juicio político pero no fue aceptada por el presidente Néstor Kirchner. El juez alegó que no se respetó su derecho a defensa ya que se puso una fecha de juicio en la que su abogado, Sebastián Sal, tenía previsto un viaje de trabajo al exterior, lo que Tiscronia asegura le fue comunicado al Jurado con anticipación. Ahora asisten al suspendido juez los defensores oficiales Javier Marino y Santiago Bardi.
Para este lunes también se esperaba la declaración de dos testigos. Se trata del ex juez del tribunal oral en lo penal económico Ernesto Gandolfi y el abogado Héctor Vidal Albarracín, todos citados por la defensa. También iba a declarar el abogado Miguel Ángel Almeyra pero pidió postergación.
Este es el tercer jury contra Tiscornia. Las otras dos veces se lo acusó de mal desempeño en la tramitación de las causas de la mafia del oro y la aduana paralela pero fue absuelto por el Senado de la nación. Esto ocurrió antes de la creación del Jurado de Enjuiciamiento cuando la Cámara Alta funcionaba como el tribunal responsable de juzgar a los jueces.
Las declaraciones continuarán a lo largo de toda la semana. Se presentarán los jueces en lo penal económico Marcos Gravibker, Jorge Brugo y Roberto Hornos y los ex magistrados del fuero Julio Cruciani y Julio Speroni. También declararán los camaristas federales Martín Irurzún y Horacio Cattani y los fiscales Raúl Plee (de casación), Carlos Rívolo (federal) y Roberto Leanza y Schamun (penal económico). Quienes están cumpliendo funciones judiciales lo harán por escrito.
El tribunal que juzga a Tiscronia está integrado por los jueces Emilio Fernández y Abel Sánchez Torres; la abogada Delia Támaro; los senadores Norberto Massoni (UCR) y Cesar Gioja (Frente para la Victoria); y los diputados Manuel Baladrón (Frente para la Victoria) y Pedro Azcoiti (UCR).
El Jurado resolvió que los alegatos de las partes sean el lunes 3 de diciembre aunque en un primer momento se habían fijado para este viernes.
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