Walter Ramón Cisneros nació hace 40 años en Famaillá, provincia de Tucumán. El trajín de la vida lo llevó a Villa Regina, en Río Negro, donde formó una familia y logró instalarse. Pero, sin embargo, la aparente tranquilidad de su vida se vio interrumpida por un delito que él mismo, según la acusación, cometió y que le valió un pedido de detención que tardó seis años en cumplirse: llevó a cabo una violación.
Así lo entendió el juez de la localidad rionegrina, Federico Dalsasso, quien libró esa orden en 2008. Pero las fuerzas uniformadas nunca pudieron dar con el acusado. Eso fue porque se dio rápidamente a la fuga, y con un poco de ayuda del parecido atávico que brindan los genes y algunos movimientos que permitieron que sea reconocido como Julián, el hombre se hizo pasar por su hermano durante todo ese tiempo, viviendo en la ciudad tucumana en la que había nacido.
El comienzo de esta fructífera y última búsqueda fue en marzo de este año, cuando José Díaz, jefe de la Brigada de Investigaciones Oeste de Tucumán, recibió un pedido del Área Judicial e Investigativa General Roca de la Policía de Río Negro, en orden a tratar de rastrear, de alguna forma y ya con menos esperanzas que en un principio, a Cisneros.
La hipótesis, en este caso, era que podía haber estado escondiéndose en las casas de sus familiares. En una ocasión, su hermano Julio les dijo que hacía tiempo que no sabía nada de Walter. Pero el problema es que era el mismo acusado el que hablaba.
Desde la Brigada recibieron una información que permitió, de una vez por todas, dar con Walter. Cuando vivía en Villa Regina, el acusado trabajaba en una empresa de transportes que también operaba en Tucumán. Cuando preguntaron por Cisneros le dijeron que solo una persona tenía ese apellido y se llamaba Julio. Las sospechas comenzaron con este hecho, y poco después, cuando descubrieron que el Julio verdadero se dedicaba a otra cosa, lograron dar con el hombre sobre el que pesaba la orden de detención.
Con estos datos a cuestas, los integrantes del órgano uniformado recorrieron el barrio Ex Aeropuerto de la localidad tucumana, ya que el pedido de Villa Regina había adquirido más fuerza a raíz de los últimos descubrimientos. Y fue así como el viernes a la noche, después de varias horas de vigilancia, dieron finalmente con el hombre buscado durante seis años.
Uno de los miembros de la Brigada contó a los medios locales que durante la detención, Walter Cisneros les dijo que, en realidad, a quien buscaban era a su hermano, refiriéndose de forma insólita a sí mismo para tratar de escapar una vez más de la ya inevitable detención.
Estaba acompañado por una mujer y un niño que resultó ser su hijo. Pero ella afirmó que no sabía que el prófugo estaba utilizando el nombre de su hermano para escapar de la Justicia. Ahora, tras la detención, se podría sumar una nueva causa en su contra por usurpación de identidad.
dju
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