La Cámara del Trabajo hizo lugar al reclamo de un empleado que perdió una pieza dental y tuvo que colocarse una prótesis. Se determinó una incapacidad parcial y permanente establecida en la pericial médica por el 6,5 % de la total obrera.
En los autos “B., A. G. C/ Swiss Medical Art S.A. S/ Accidente - Ley Especial”, la Cámara Nacional de Apelaciones del Trabajo falló a favor de un empleado que perdió una pieza dental y tuvo que colocarse una prótesis.
Según se desprende de la causa, el trabajador se desempeñaba como vendedor para una empresa dedicada a la comercialización de productos de pintura y que, estando en su lugar de trabajo, golpeó su rostro en un desnivel del techo de una escalera con su boca, lo cual le produjo la ruptura del diente incisivo superior y una herida cortante en el rostro, por lo que fue derivado a la ART para su atención. Por el accidente tuvo que reemplazar “la pieza dentaria del diente incisivo superior lateral y su sustitución con un perno y corona, siendo evidente su cambio”.
El sentenciante de grado rechazó la acción al entender que, "si bien la contingencia que padeció el reclamante le produjo la rotura de una pieza dentaria, el actor no sufrió su pérdida total pues se llevó cabo un tratamiento de fijación con colocación de perno y corona, es decir, se le colocó una prótesis fija".
En este escenario, los jueces Gregorio Corach y Leonardo Ambesi revocaron el pronunciamiento de grado y afirmaron que “frente a una pérdida dentaria las prótesis tienen menos resistencia que las piezas dentales naturales y las fijas están expuestas a sufrir aflojamientos que en definitiva requieren siempre reemplazos, los que muchas veces no son posibles debido a la degradación del hueso”.
El accionante, sin embargo, sostuvo que se trató de una pérdida traumática ocasionada por un accidente de trabajo y que le ocasiona “problemas de pronunciación y de mastificación”. También resaltó que una prótesis dental dura entre 10 a 12 años, con lo cual precisara durante toda su vida “un reemplazo constante de prótesis”.
En este escenario, los jueces Gregorio Corach y Leonardo Ambesi revocaron el pronunciamiento de grado y afirmaron que “frente a una pérdida dentaria las prótesis tienen menos resistencia que las piezas dentales naturales y las fijas están expuestas a sufrir aflojamientos que en definitiva requieren siempre reemplazos, los que muchas veces no son posibles debido a la degradación del hueso”.
“Por ello, en atención a la importancia de la función dentaria, no obstante haber sido reemplazada la pérdida del diente, se considera que la imposibilidad de recuperar la pieza genera una incapacidad física que debe ser resarcida”, concluyó la Sala X.