El Tribunal Oral Federal en lo Criminal de Paraná condenó a dos apicultores de la localidad santafesina de Villa Constitución por daño al ambiente, al considerarlos responsables de un incendio intencional ocurrido en agosto de 2022 en la zona de islas del Delta del Paraná.
Se trata de penas de tres años de ejecución condicional para los acusados, un apicultor y su hijo. Un tercer involucrado resultó absuelto porque era menor de edad -otro hijo del apicultor- al momento de los hechos.
Se les imputó haber provocado un incendio intencional y quema de pastizales, aproximadamente a las 12 horas del día 14 de agosto del 2022, en la zona a del arroyo los laureles, islas del Holandés, ciudad de Victoria, provincia de Entre Ríos. La conducta se encuadró en el artículo 186, inciso 1 del Código Penal, esto es, incendio y otros estragos.
Los condenados también deberán realizar un curso sobre el cuidado del medio ambiente por cualquier modo, presencial o virtual; como también la efectivización de tareas comunitarias cuyo fin será reforzar la flora autóctona, sembrando un mínimo de 10 árboles en beneficio de la comunidad, ya sea en las calles de la ciudad donde se domicilian y/o 3escuela, iglesia o institución deportiva a su elección.
El siniestro sucedió en momentos en que se produjeron cientos de incendios intencionales en esa zona de islas entrerrianas, ubicadas frente a la costa santafesina del río Paraná, que afectó con el humo y las cenizas a varias ciudades, entre ellas a Rosario.
Los condenados también deberán realizar un curso sobre el cuidado del medio ambiente por cualquier modo, presencial o virtual; como también la efectivización de tareas comunitarias cuyo fin será reforzar la flora autóctona, sembrando un mínimo de 10 árboles en beneficio de la comunidad, ya sea en las calles de la ciudad donde se domicilian y/o 3escuela, iglesia o institución deportiva a su elección.
Para la magistrada, los hombres conocían las “características del ambiente donde encendieron fuego, advertidos por incendios que se propagaron durante ese año 2022, y el anterior, sabiendo que las autoridades estaban dedicadas a combatirlos, como así también contaban con capacidades intelectuales para evaluar los perjuicios que ocasionaban en el medio ambiente, personas, flora, fauna y superficie terrestre”.
“Ambos realizaron conductas con aptitud suficiente para obtener el resultado prohibido por la norma, ambos estaban en condiciones de representarse el riesgo concreto de producción del resultado”, añadió.