Dos hermanas interpusieron una demanda contra Prisma, Despegar y el Banco Santander, reclamando $230.000 de daños y perjuicios más intereses.
En el relato de los hechos, explicaron que pretendían hacer un viaje juntas a Rio de Janeiro para festejar el cumpleaños de 60 de una de ellas, por lo que la cumpleañera compró su pasaje por Aerolíneas Argentinas y la hermana sacó su pasaje mediante el canje de puntos de la tarjeta de crédito.
Para su sorpresa , si bien la compra se efectuó y los puntos se debitaron, ese mismo día se canceló la transacción y le devolvieron los puntos a través del programa del banco, sin que la notifiquen de lo ocurrido.
Fue así, que cuando intentó hacer el check-in del vuelo, se encontró con que el pasaje había sido cancelado. Esta situación dio lugar a que se comunique con el banco para hacer un reclamo de donde la derivaron a hablar con la agencia de viajes Despegar, que a su vez le indicó que era responsabilidad del banco.
Entre reclamos y llamados, la mujer finalmente no logró conseguir boletos para esa misma fecha, lo que culminó con su hermana viajando sola a Brasil, sin que pudieran concretar el festejo y terminaran ese día las dos llorando.
Si bien la pericia comprobó que se efectuó el canjeo de puntos, los mismos se reintegraron en menos de una hora, y el pasaje nunca se llegó a emitir
El caso, caratulado “G. O. E. y otro c/ Prisma Medios de Pago y Otros s/ Ordinario” obtuvo un pronunciamiento desfavorable a las hermanas, dado que el juez entendió que si bien la pericia comprobó que se efectuó el canje de puntos, los mismos se reintegraron en menos de una hora, y el pasaje nunca se llegó a emitir.
Las actoras no acompañaron documental que respaldara sus dichos de que tenían un pasaje y que hubiera intentado realizar el check in, por lo que se concluyó que Despegar al comprobar que no había disponibilidad para esa fecha, devolvió los puntos.
En los términos y condiciones del programa Superclub de la tarjeta había una cláusula según la cual “los premios están sujetos a disponibilidad”, lo que hacía caer el reclamo
Pero sumado a ello, cobraba mayor relevancia aún el hecho de que en los términos y condiciones del programa Superclub de la tarjeta había una cláusula según la cual “los premios están sujetos a disponibilidad”, lo que hacía caer el reclamo.
Las mujeres apelaron y la causa quedó radicada en la Sala E de la Cámara Nacional de Apelaciones en lo Comercial, donde se quejaron de que existió una publicidad engañosa al ofrecer algo que no estaba disponible, que nunca se les notificó de la cancelación, que la mujer se tuvo que quedar en el país por razones ajenas a ella, que la compra se perfeccionó cuando se canjearon los puntos, entre otros.
Pero los camaristas Miguel Federico Bargallo, Gerardo G. Vassallo y Pablo Damián Heredia terminaron por rechazar el recurso y confirmar la sentencia, con costas, aunque aclarando que sobre estas últimas podría aplicarse el precedente “Hambo”.
Para los jueces de la cámara, las actoras no fundaron correctamente su recurso, no se reclamó como abusiva la cláusula contractual invocada ni se probó que efectivamente la hermana haya viajado sola a pasar su cumpleaños, el ticket nunca se emitió, y la devolución de puntos se realizó en menos de una hora, siendo aplicable la “disponibilidad” a la que se hacía referencia.