Cada vez son más los jueces que utilizan la ayuda de la inteligencia artificial al momento de redactar sus sentencias.
Desde ayuda en la redacción o por consultas técnicas en Argentina, la búsqueda del significado de un término en EEUU y hasta el reemplazo de un perito en Países Bajos.
En esta oportunidad le tocó a Colombia, cuya Corte Constitucional se expidió recientemente sobre el uso de la IA generativa por parte de los jueces.
En la últimas semanas se dieron a conocer al menos tres fallos en los cuales se utilizó la inteligencia artificial, aunque uno de ellos despertó polémica.
El primer caso se trata de un fallo del Tribunal Superior del Distrito Judicial de Pasto (Sala de Decisión Penal) que utilizó ChatGPT 4º mini para buscar el significado de la palabra “hombrecito” que había sido utilizada en una demanda para referirse a un abogado con una connotación negativa.
En esta oportunidad le tocó a Colombia, cuya Corte Constitucional se expidió recientemente sobre el uso de la IA generativa por parte de los jueces. En la últimas semanas se dieron a conocer al menos tres fallos en los cuales se utilizó la inteligencia artificial, aunque uno de ellos despertó polémica.
En el caso el tribunal no solo explicó la herramienta utilizada y su razón, sino que también adjuntó imágenes de las respuestas brindadas por la IA, citando como nota al pie que su uso estaba permitido a raíz de la sentencia T-323/24 de la Corte Constitucional antes referida.
En el segundo caso del Tribunal Superior de Distrito Judicial de Medellín (Sala Civil de decisión), utilizó la herramienta de Microsoft “Copilot 365” para ayudarse en el conteo de los términos para interponer un recurso.
En esta oportunidad, el tribunal también cito al pie de página la utilización de la herramienta bajo la expresión “Declaración de transparencia”, siguiendo los parámetros de la sentencia T-323/24.
En el último caso, se trató de un fallo de la Corte Suprema de Justicia de Colombia (Sala de Casación Penal) que, a diferencia de los dos casos previos el uso de la inteligencia artificial fue advertido por los lectores de la sentencia, que rápidamente compartieron el “error” en redes sociales.
Esta expresión, ajena al contexto de la sentencia, se entendió por los usuarios como un error al momento de “copiar y pegar” desde una herramienta de inteligencia artificial, aparentemente utilizada para mejorar la redacción de la resolución.
Es que, en este caso, bajo el párrafo 27 (pág 18), se transcribió lo siguiente: “27. Se han corregido aspectos de redacción y estructura para mejorar la coherencia y claridad del texto, siguiendo el estilo formal y respetuoso que has solicitado. Si tienes alguna observación o cambio adicional, por favor házmelo saber.”
Esta expresión, ajena al contexto de la sentencia, se entendió por los usuarios como un error al momento de “copiar y pegar” desde una herramienta de inteligencia artificial, aparentemente utilizada para mejorar la redacción de la resolución.
Esta situación generó posiciones encontradas en los usuarios que cuestionaron el accionar en redes sociales, dado que la sentencia del mas alto tribunal no menciona en su texto que se haya utilizado alguna herramienta de IA, y en caso de haber sido utilizada además se habría incurrido en el error de no leer bien el texto que se pegó en la redacción final.
Lo que iría en contra de los recientes postulados de la Corte Constitucional analizados en esta nota.
No es la primera vez que existe una polémica por el uso de la inteligencia artificial en una sentencia como ocurrió recientemente en Brasil, en un escrito presentado en Australia o incluso en España, por lo que habrá que seguir capacitando en la materia para evitar este tipo de conflictos.